¡Bienvenido, sol!

Sol… sí, sol, cuánto tiempo esperando a sentir su calor. El verano se ha hecho esperar pero al final, aquí está. Y parece que con buenas noticias ya que Asturias, en estos momentos, es la segunda comunidad donde más reservas de turismo rural se están registrando. Con optimismo, se espera que esta tendencia sea la de todo el sector.
Otra buena noticia es la nueva Directiva recién aprobada en la UE que acaba con el impuesto al sol y las trabas al autoconsumo. Establece que el porcentaje de renovables sobre la energía total de un país sea del 32% de cara a 2030. Dicha normativa será de aplicación obligatoria para todos los países a partir de 2021, pero el giro en la posición del nuevo Gobierno español en las negociaciones europeas hace pensar que en nuestro país se aplique antes de esa fecha. Una celeridad con la que no están muy de acuerdo el gobierno autonómico y los sindicatos del carbón que centran más la mirada en el fin de la minería y el cierre de centrales térmicas de carbón, que en la oportunidad que podría suponer esta transición energética para la región. Asturias es rica en agua, biomasa, viento, sol, y no puede perder este tren. Como su nombre indica, ‘transición energética’ es una evolución progresiva, en este caso hacia un nuevo modelo económico tan necesario. Comentaba recientemente el catedrático de Economía Aplicada, Juan Vázquez que en Asturias hay más tendencia a fijarse en lo declinante que en lo emergente y que eso, en el debate energético, está quedando patente. Ojalá se equivoque y nuestros ‘negociadores’ y representantes sepan estar a la altura de las circunstancias y aprovechen esta oportunidad.