Tiene el orgullo de ser el coro más antiguo de Asturias y uno de los más veteranos de España. Y están en el corazón de la cuenca minera, manteniendo una actividad musical que pretende ser memoria de una cultura que se resiste a desaparecer: la que nació y creció a la sombra de la mina.
Celebró su centenario en 1997, y si bien no ha estado en activo de manera permanente -interrumpió su actividad por ejemplo durante la Guerra Civil- el Orfeón de Mieres ha conservado siempre viva la inquietud por el canto. Hoy, sus aproximadamente cuarenta miembros están bajo la dirección de Joaquín Sandúa Fernández, y continúan actuando y organizando cada año el Encuentro coral de los Pueblos Mineros, coincidiendo con las Fiestas de San Xuan. Don Eustaquio Álvarez Hevia es el actual presidente de la Junta directiva.
-Una trayectoria muy amplia, paralela a la historia del concejo de Mieres.
-Dése cuenta de que aunque pasamos años sin actividad, de una u otra manera seguíamos funcionando. Nuestra historia está ligada a la industrialización de Mieres. El Orfeón empezó con miembros pertenecientes a las empresas de minería y de siderurgia que se instalaron en la zona. Estamos hablando del siglo XIX. Ha llovido mucho desde entonces.
-¿Qué significa para Mieres?
-Es un referente en la ciudad porque todos lo conocen y hablan de él. Son muchas las veces a lo largo del año que actuamos en distintos lugares del concejo o en las iglesias cuando son conciertos sacros. El Orfeón es muy conocido y muy querido.
«Quisimos crear un evento para que otros coros mineros pasasen por aquí, coincidiendo con las Fiestas de San Xuan de Mieres. Son los Encuentros Corales de los Pueblos Mineros»
-De todos los premios recibidos, ¿cuál se recuerda con especial cariño?
-Ninguno lo vivimos, pero en la época de Alfonso XIII el Orfeón fue recibido en Madrid y homenajeado. Se le dio la Cruz al Mérito Civil al director en aquel momento, durante su actuación en el Palacio Real.
-El año 2002 fue especial porque se crearon los Encuentros Corales de los Pueblos Mineros. ¿Qué significado tienen para el Orfeón?
-Queríamos colaborar en mantener viva la cultura minera, que se estaba olvidando un poco con el declive del sector. Como nosotros nacimos y crecimos en el marco de la Cuenca, quisimos crear un evento que hiciese que los coros mineros de España pasasen por aquí, y lo hicimos coincidir con el programa de las Fiestas de San Xuan de Mieres. Recientemente hemos extendido la convocatoria a cualquier tipo de coro, no sólo mineros, pero la filosofía sigue siendo la misma: el recuerdo a esta cultura surgida alrededor de la mina.
-También tienen una publicación anual desde el año 2004. ¿Con qué motivo surge?
-Cuando ya llevábamos dos años celebrando los encuentros corales consideramos que podíamos hacer una publicación con el objetivo de contar las actividades del Orfeón a lo largo de año, con todas nuestras salidas y actuaciones ilustradas con fotografías. Nuestra revista Coral se hace llegar a todos los miembros de la Asociación Cultural Orfeón de Mieres.