Infusionar la leche con la canela y la piel de limón y dejar enfriar, añadir el edulcorante. (Se puede cambiar el edulcorante por azúcar)
Poner las rebanadas de pan en una bandeja y poner la leche por encima, dejar unos diez minutos de reposo (Foto 1).
Precalentar la gofrera y untar con aceite usando un pincel.
Batir los huevos, pasar las rebanadas de pan por el huevo tratándolas con cuidado para no romperlas.
Poner en la gofrera, cerrar y dejar cocinar hasta que estén doradas, unos cinco minutos.
Sacar y poner en un plato, servir con el acompañamiento deseado, yogur, fruta, canela... Nosotros las comimos sobre natillas ligeras sin lactosa y sin azúcar.