En un recipiente ponemos 100 gramos de harina, 60 gramos de leche, el gramo de levadura fresca y mezclamos todo muy bien.
Dejamos que fermente durante toda la noche.
Al día siguiente, en el mismo recipiente que tenemos la mezcla añadimos la harina, 3 huevos, agua de azahar, azúcar, la ralladura de limón y naranja, el ron, la esencia de vainilla y la sal.
A continuación removemos bien toda la mezcla y vamos incorporando poco a poco la leche, hasta que consigamos una masa sólida.
Amasamos unos 5 minutos, y añadimos la levadura y la mantequilla. Trabajamos nuevamente hasta obtener una masa suave y elástica que dejaremos reposar tapada durante dos horas aproximadamente.
Cuando haya pasado el tiempo sacamos el recipiente con la masa y amasamos un poco más. Volvemos a tapar durante unos 15 minutos.
Pasado este tiempo empezamos a darle forma de rosca haciendo un agujero en el medio. Pintamos con huevo batido y déjamos fermentar durante dos horas aproximadamente.
La masa crecerá y volveremos a pintarla con huevo batido. Colocamos la fruta escarchada y la almendra.
Por último metemos el roscón en el horno a 180 grados durante 25 minutos, estando muy pendientes de que no se queme. Luego lo tapamos con papel de aluminio y lo volvemos a poner otros 5 minutos más.
¡Y ya está listo para sacar del horno!
Notes
Si queremos rellenar el roscón debemos esperar a que se haya enfriado para abrirlo por la mitad y rellenarlo de nata, nata y almendra o bien crema de chocolate y avellana...