Los éxitos deportivos alcanzados por el Club en campeonatos nacionales y regionales demuestran que el remo ha vuelto a Ribadeo para quedarse.
Miguel Balsa, presidente del club, es un apasionado de este deporte. Junto a Mauricio Monteserín, actual entrenador y olímpico con la selección nacional en Sidney 2000, ha asumido el reto de asentar el remo en la sociedad de Ribadeo y conseguir que los más jóvenes se enganchen a este deporte cargado de valores. “Cogimos el club porque llevaba mucho tiempo parado. Estamos en activo desde hace cuatro años y en este tiempo hemos conseguido buenos resultados y nos hemos consolidado en el remo olímpico. Aquí el remo estuvo muy arraigado, pero con el paso del tiempo fueron cambiado las cosas y deportes como éste entraron en decadencia mientras que el fútbol fue creciendo, por eso es importante la presencia de clubes como el nuestro”.
Ribadeo es un municipio perfecto para esta modalidad deportiva que exige disciplina y sobre todo mucha capacidad de superación. Los entrenamientos que realizan desde el club son prácticamente diarios lo cual implica que los jóvenes estén muy vinculados al medio y su entorno. “Entrenamos en la ría y en las instalaciones del club, estamos en un sitio privilegiado porque nuestro entorno tiene unas condiciones muy buenas para poder practicarlo -añade Balsa-. Además gracias a la ayuda del Concello acabamos de estrenar unos vestuarios nuevos que suponen una gran mejora para nosotros”.
Los impulsores del Club reconocen que la idea de crear una cantera no es fácil porque es un deporte muy sacrificado y los chavales se inclinan más hacia el fútbol o el baloncesto. A esto también se suma que al llegar una edad muchos de ellos se marchan a estudiar fuera desvinculándose de la actividad deportiva. Actualmente el colectivo cuenta con veinte niños y jóvenes con edades de entre 10 y 17 años. “Es un deporte que engancha, aunque es muy duro y te hace superarte en el día a día. Te enseña a sacar lo mejor de ti y además da oportunidades a todos los niños; chavales que a lo mejor no destacan en la clase de educación física consiguen unas metas que de otra forma serían difíciles para ellos”.
Con la reactivación del Club también se pretende programar actividades de ocio y que gente de más edad que desee probar el remo pueda hacerlo con unas condiciones mínimas. “Queremos potenciar el remo veterano para que quienes ya lo practicaban tengan las puertas abiertas -reconoce Balsa-. Como presidente es una de mis ambiciones porque creo que es bueno para todos, no solo para los niños”.
Actualmente el colectivo tiene centrada su actividad en el remo de competición, concretamente en el olímpico. De momento no contemplan incluir el tradicional porque el material necesario para ello tiene un elevado coste económico, y aunque cuentan con ayudas del Ayuntamiento y la Diputación de Lugo el presupuesto es ajustado.
Los resultados obtenidos desde sus inicios refrendan la buena salud del Club. Han conseguido dos campeonatos de España tanto en agua como en remo indoor, el último en tierras ourensanas. También han ganado medallas de plata y bronce en varias categorías de campeonatos nacionales. “A nivel autonómico -continúa Balsa- todavía estamos mejor porque el año pasado todos los integrantes del club que fueron al campeonato consiguieron medalla. El año 2017 fue el único en el que no se consiguieron medallas pero sí cuartos puestos. A nivel nacional, en 2018 se consiguió un bronce y este año ya hemos conseguido un oro y un bronce además de que ocho integrantes del club estuvieron en la selección gallega. Todos los años tenemos salidas a Sevilla, Girona o País Vasco para competir. Para un municipio como el nuestro esto es muy bueno porque te das a conocer. Nos ayuda mucho ya que la gente ve que estás haciendo un trabajo serio”.