Este verano Cangas del Narcea inaugura unas nuevas instalaciones para el Museo Etnográfico del Vino. La historia de estos caldos, que se remonta a más de mil años, se verá reflejada en las salas de este museo municipal, gestionado por la Asociación Cultural San Tirso y Amas.
Los habitantes de Cangas del Narcea han encontrado en la tierra su mejor aliado. Años de trabajo han conseguido que Cangas no se conozca tan sólo por ser uno de los enclaves mineros asturianos, sino también por la elaboración de unos vinos que sorprenden a los paladares más exquisitos.
Para recuperar y promocionar la cultura vitivinícola canguesa, el Ayuntamiento ha realizado unas importantes obras de ampliación del Museo Etnográfico del Vino y ha puesto en marcha un proyecto mucho más completo en el rehabilitado y recuperado Llagar de Santiso.
Los vinos de Cangas están respaldados por una historia de más de mil años, por eso el museo quiere destacar no sólo los vinos sino también todo cuanto los rodea: las características de la tierra, el clima, las variedades de uvas, los utensilios utilizados en su producción, los trabajos de la viña y de bodega, la elaboración… El Museo tendrá además dos salas de audiovisuales y una sección dedicada a los aromas y los colores. El exterior se aprovechará para instalar maquinaria de bodega y se plantarán cepas en espaldera y en emparrado, las dos formas tradicionales que se utilizan en las plantaciones de Cangas del Narcea.
Este nuevo museo, gestionado por la Asociación Cultural San Tirso y Amas y financiado por el Principado de Asturias, pretende dar a conocer de forma más completa el pasado y el presente de los vinos que se elaboran en estas tierras. Paralelamente existe una Ruta del Vino en la que participan diversas empresas como alojamientos, restaurantes, enotecas y bodegas.
En la primera mitad del año los viajes y asistencias a capítulos de otras cofradías han sido muchos: Tineo, Noreña, Santander, La Rioja, Ribera de Duero, Portugal… Por delante les queda la participación en eventos como la Fiesta de la Esfoyaza en Navelgas, donde el año pasado se les concedió la “Panoya de Oro”; el hermanamiento con la Cofradía del Alvariño, en Cambados (Pontevedra); o el viaje al Congreso de Burdeos (Francia) programado para noviembre.
Sin embargo, el acto que más repercusión tiene para todos los participantes es el Gran Capítulo de la Cofradía del Vino de Cangas, que este año celebra su VII Edición. Coincidiendo con la Fiesta de la Vendimia, el programa es similar a otros años: a las diez de la mañana se recibe a los cofrades en el Ayuntamiento, para después desfilar por Cangas hasta la Basílica, donde se celebrará una misa solemne y una actuación de la Coral Polifónica de Cangas. Al salir, de nuevo desfile hasta el Teatro Toreno, donde se celebrará el Capítulo propiamente dicho, en el que se nombra a los cofrades de número y de honor. Mari Paz Pondal y el crítico gastronómica de La Nueva España Antonio Fidalgo son este año los galardonados con el título de cofrades de honor. También se espera, pendiente de confirmar definitivamente, la presencia del gaitero Hevia.
Así, año tras año, la Cofradía del Vino de Cangas mantiene sus tradiciones y reivindica el vino de la zona como un reclamo gastronómico de primer orden.
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