La cultura del vino en Occidente tiene raíces muy profundas, y Pesoz es uno de los rincones bendecidos con un microclima propicio para el cultivo de vides. Por eso, el vino aquí es tan protagonista que hasta tiene un museo en su honor.
El Museo Etnológico de Pesoz se encuentra ubicado en la capital del concejo. Abrió sus puertas en el año 2007, y desde entonces es la referencia para los visitantes que quieren conocer detalles de la cultura popular. Porque en este concejo, la vendimia y la elaboración del vino es un asunto doméstico que llevan a cabo las familias principalmente para consumo propio y lo hacen siguiendo la tradición. Cuando llega el momento de recoger la uva todas las manos son bienvenidas, así que junto al vino se reúnen parientes y amigos.
La dotación museística muestra a través de paneles explicativos y un vídeo el proceso de elaboración del vino y también el cultivo de la vid. En su recorrido por este equipamiento, una sala reproduce una bodega tradicional que permite conocer el proceso una vez que la uva ha sido recogida. Se revelan los secretos de la destilación y cuáles son las variedades de uva utilizadas, normalmente Albarín blanca o las tintas, Mencía, Verdejo Tinto o Albarín negra.
La información suministrada contribuye a sumergir al visitante en el mundo vitivinícola más ancestral, el que se inició en tierras de montaña por los habitantes de los primeros monasterios asturianos, en torno al siglo IX. Los monjes descubrieron que al abrigo de las masas montañosas, en laderas de fuertes pendientes y en terreno pedregroso podían desarrollarse los viñedos. Y su descubrimiento ha llegado hasta nuestros días permitiendo al concejo de Pesoz aportar grandes caldos al sector.