18.4 C
Oviedo
domingo 24, noviembre 2024

Recorriendo Asturias. G.M. El Trasgu Andayón

Lo más leído

El grupo de montaña El Trasgu Andayón cumple 25 años. En este tiempo han recorrido toda la geografía asturiana con su carácter abierto, entrañable y amistoso. Alfonso Fuertes ha presidido el club durante 10 años, y es actualmente directivo y asesor de este club gijonés. Nadie mejor que él para hacer balance de su actividad en el último cuarto de siglo.

-Veinticinco años como grupo federado son muchos. ¿Cómo valoráis vuestra trayectoria?
-Estamos orgullosos, porque la filosofía del Trasgu Andayón desde que empezó ha sido siempre la misma: unir a una gran familia. No tenemos un espíritu competitivo, nuestra intención es que todo el mundo pueda disfrutar en la montaña. El que puede y quiere, va más rápido; el que no, menos, pero entre nosotros hay sitio para todos. En las salidas solemos hacer varios grupos con guías diferentes, de manera que cada uno pueda ir al ritmo que desee, que se pueda subir al pico, hacer un recorrido a media ladera o hacer una travesía por el valle.
Cuando llega la hora de comer procuramos hacerlo juntos, y si no es posible, de regreso compartimos merienda con sidra en algún bar o merendero donde repasamos las vivencias y anécdotas del día. Es una costumbre que une mucho a los socios, y que ha perdurado a lo largo de todos estos años. El valor principal del club es el compañerismo, los récords son para otras personas que se dedican a la competición.

“El valor principal del club es el compañerismo, los récords son para otras personas que se dedican a la competición”

-Todo este tiempo de actividad os ha permitido también incorporaros al uso de las nuevas tecnologías.
-Sí, hace ya tiempo que tenemos una página web funcionando. Ahora la tiene todo el mundo, pero cuando nosotros la pusimos en marcha sólo la tenía el grupo de Ensidesa Gijón. Tenemos en la página la mayoría de rutas de montaña que hay en Asturias, marcadas con GPS. Son alrededor de 1.200, con itinerarios para todos los gustos. También tenemos un equipo que se encarga de actualizarlas regularmente. En zonas como Picos de Europa no, pero en Ponga, por ejemplo, los montes se llenan de maleza y hay que recorrerlos cada cierto tiempo para ver si se puede seguir la misma ruta.
-Ahora que se ha popularizado la montaña hay más problemas y accidentes que antes. Desde vuestra experiencia, ¿qué es lo que está fallando?
-El monte es muy traicionero, y hay que ir siempre con gente experimentada. Ahora se va sin preparación, personas que nunca han estado en la montaña, que se agotan, que no tienen fuerza ni idea de orientación. De ahí vienen muchos problemas. Hay más pérdidas ahora con GPS que antes sin él. La gente piensa que con tener un GPS en el monte ya es bastante y no es así, es un aparato que hay que dominar muy bien porque si no puede ser peor.

“Al monte hay que ir con gente experimentada. Muchos van sin preparación, hay más pérdidas ahora con GPS que antes sin él”

-Después de tantas excursiones, ¿hay alguna que haya quedado grabada de una forma especial?
-Tengo una de hace muchos años, en el 90 más o menos. Entonces yo era presidente del grupo, y en esa salida subieron unas cuarenta personas a la cumbre del Torrecerredo. Nunca lo hubiera imaginado, porque en muchos de los que subieron yo no veía cualidades para conseguirlo. Yo siempre digo que para algunas personas una pequeña cumbre puede ser una gran victoria, y tanto me emocioné que pagué una placa de mi bolsillo a cada uno de los que subieron, para que recordaran aquel día en el que muchos acabaron llorando de emoción.
-¿Qué proyectos tenéis para los próximos 25 años?
-Sobre todo conseguir que la juventud no se canse. Ahora el grupo lo está llevando gente de unos cuarenta años, así que de momento hay futuro. El gran reto es que esto siga adelante, y que se conserve siempre ese ambiente familiar y esa amistad que nos ha caracterizado todo este tiempo.
Y por último, que no se pierda la costumbre de hablar con la gente de los pueblos. El montañero tiene que respetar, pedir permiso si tiene que pasar por una finca, pararse un momento, por mucha prisa que tenga, y hablar con los vecinos. Es lo menos que se debe hacer.

¿De cuánta utilidad te ha parecido este contenido?

¡Haz clic en una estrella para puntuarlo!

Promedio de puntuación 2 / 5. Recuento de votos: 1

Hasta ahora, ¡no hay votos!. Sé el primero en puntuar este contenido.

Más del autor /a

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

- Publicidad -

Últimos artículos

- Publicidad -