Nadie sale a practicar su deporte favorito pensando en que puede tener un accidente, pero esa posibilidad existe. Si se practica algún deporte de forma habitual, más si es de riesgo, puede llegar un momento en que nos interese estar federado por las ventajas que ello puede suponer.
La primera de ellas y más importante es la cobertura de responsabilidad civil y también en caso de accidente. Disfrutarás de un seguro médico privado para cualquier tipo de lesión derivada de la práctica deportiva y su tratamiento: cirugía, rehabilitación, etc. en hospitales o clínicas privadas. Derecho a indemnizaciones en caso de accidentes graves o a rescates en caso de que ocurra el accidente en zonas de difícil acceso.También te permite participar en eventos deportivos y actividades que organice la Federación, así como acceder a cursos de formación. Si lo que te interesa es competir, los federados tienen la posibilidad de participar en los Campeonatos y Copas de España de diferentes modalidades del deporte que practican.
Podrás tener acceso a premios y subvenciones económicas en función de los resultados obtenidos como apoyo a tu trayectoria deportiva.
Algunas federaciones ofrecen descuentos a la hora de realizar actividades relacionadas con el deporte que practicamos y también en alojamientos, albergues, campings, tiendas de deportes, estaciones de esquí o librerías especializadas, por ejemplo.
Pero sobre todo, sentiremos detrás el amparo de una federación grande, organizada, que además de promocionar y gestionar el deporte en cuestión, ayuda a mejorar el rendimiento de los deportistas y su seguridad, y defiende los intereses del colectivo. Una federación es un grupo de personas que te va a respaldar y ayudar en lo que necesites y eso aporta tranquilidad.
En cuanto a los precios, varían en función de la edad, el deporte que se practique y la cobertura geográfica. Cada uno ha de evaluar sus intenciones y preferencias y en base a ello elegir la que más se ajuste a su caso. Una vez asegurado, solo nos queda disfrutar del deporte, eso sí, siempre con cabeza.