Conviven diariamente con un tráfico excesivo, un problema que a día de hoy no parece tener fácil solución. A pesar de ello, el Polígono Industrial del Espíritu Santo es una referencia de gestión y actividad, con unas cifras de ocupación que se han mantenido incluso en los peores años de la crisis.
-El pasado año hubo elecciones dentro de la asociación y salió elegido Presidente. ¿Cómo se plantea el trabajo la nueva Junta Directiva?
-No ha habido variaciones prácticamente, sólo se ha cambiado de presidente. Carlos Brun, mi predecesor, propuso por razones laborales que otro empresario asumiera esta responsabilidad. Lo estudiamos y nos pareció bien. En el fondo, seguimos las mismas personas y continuaremos en la misma línea.
-¿En qué estado se encuentra el proyecto del Centro de Servicios, con el que se iba a ocupar la única parcela vacía que queda en el polígono?
-El pasado año hablamos con el Ayuntamiento para habilitar parte del espacio como zona de aparcamiento. En realidad, se presentaron dos proyectos al IDEPA, uno en colaboración con el Ayuntamiento, para construir el citado aparcamiento y otro para instalar en el polígono cámaras de seguridad. Por circunstancias no pudo salir adelante ninguno de los dos. Y nos encontramos con que se va a multiplicar el problema de aparcamiento que tenemos actualmente, porque han llegado empresas nuevas como Orange y Saltoki, con cientos de trabajadores.
-¿Continúa pues en la cartera de proyectos, a corto o medio plazo?
-Seguiremos buscando un inversor para gestionar esa parcela que tenemos libre y volveremos a solicitar una subvención al IDEPA para la construcción del aparcamiento, que es la opción más viable económicamente.
«La densidad de la circulación sigue siendo un problema. Sacar de aquí el tráfico de Parque Principado es algo muy complejo»
-¿La falta de aparcamiento, junto con la intensidad del tráfico, son hoy día los grandes retos del Polígono Espíritu Santo?
-Puede haber alguna cuestión puntual pero esos son nuestros dos grandes problemas en la actualidad. La limpieza, los transportes, las comunicaciones, el alumbrado, funcionan correctamente. Son responsabilidad del Ayuntamiento de Oviedo, que nos trata muy bien y con el que tenemos buena sintonía. La densidad del tráfico sigue siendo un tema que ni el propio Ayuntamiento puede solucionar. Realmente sacar de aquí el tráfico de Parque Principado es muy complejo.
-A lo que habría que sumar los vehículos de las distintas empresas de transporte…
-Bueno, eso es más puntual. Además del propio Centro de Transportes, hay días en los que se pueden juntar varios camiones a la hora de entrar en una nave y como tampoco hay donde aparcar, se quedan atravesados y la gente protesta. Pero sólo ocurre en ocasiones.
-La glorieta de entrada al polígono ha tenido que suponer una mejora importante en cuanto a fluidez de circulación, sin embargo hay quejas de los peatones, que al tener prohibido el paso por esa zona, no tienen claro por dónde pueden cruzar.
-La glorieta ha sido una mejora muy notable porque se sale directamente a Gijón o incluso a Oviedo, sin pasar por la Tenderina, y es un buen enlace para esta zona del polígono. No me constan esas quejas pero la realidad es que sí está complicado el cruzar por esa zona. Habría que estudiar fórmulas.
-Este polígono tradicionalmente es de los que presumen de plena ocupación. ¿Sigue siendo así?
-Si no hay una ocupación total en estos momentos, estaremos muy cerca de ello. Tenemos este año más ocupación que el pasado. Hay que tener en cuenta que se trata de un polígono muy céntrico, con todos los servicios a mano, y buena comunicación.
-Su participación en el proyecto APIATic se ha incluido en el portal de la Federación Apia (poligonosindustrialesdeasturias.com). ¿Qué ha supuesto para las empresas?
-Creo que es algo muy positivo porque conocernos entre nosotros lleva a una mayor colaboración y también a una mejor gestión de los problemas, surgen nuevas posibilidades de avance, de cooperación entre empresas, de sinergias. Es una herramienta muy importante de promoción y de negocio que hay que explotar.