Los vecinos de Bimenes saben que un pueblo sin memoria no tiene futuro ni puede evolucionar. Por ello se crea hace veinte años, la Asociación Cultural Los Yerbatos en la que participan vecinos de todas las edades. Orfelina Suárez, su presidenta, explica que además de recuperar tradición y cultura luchan por mantener viva y promocionar la Llingua Asturiana.
-Se cumplen veinte años de andadura de Los Yerbatos, ¿cuál es el balance?
-Muy positivo. Casi podría decir que no recuerdo nada malo en estos años. Por aquí han pasado muchos chavales, ha sido y sigue siendo un importante intercambio generacional ya que participan de la misma manera niños, jóvenes o mayores.
-¿Cómo surge la idea de crear la Asociación?
-Empezaron niñas y niños como una actividad extraescolar de asturiano en el AMPA (Asociación de Madres y Padres de Alumnos). Luego se animaron los padres y algún abuelo. Dado el interés que generaba pensamos en constituir una asociación y retomamos el nombre de una ya desaparecida. Empezamos con bailes asturianos, luego vino la música y lo que serían los inicios de la actual Escuela Tradicional (gaita, tambor y curdión diatónico) y también confeccionamos los trajes.
-Además de baile y música, realizan un importante trabajo de recuperación del folclore tradicional…
-Sí, hicimos un trabajo de investigación melodías y canciones tradicionales. Recopilamos también fotos antiguas para que nos sirvieran para hacer las indumentarias tal y como eran antes. Y luego, trabajamos mucho en la defensa de la Llingua Asturiana con la esperanza de que algún día pueda convertirse en cooficial. En la asociación hay un gran interés en el estudio de las tradiciones, del folclore de la zona.
«Participamos en un proyecto europeo con Escuelas de Música Tradicional de distintos países»
-Como defensores de la cultura asturiana, se han convertido en una asociación de referencia no solo en Bimenes sino en toda la comunidad.
-Detrás de todo hay mucho trabajo, entrega y dedicación. La gente colabora y participa y eso es un motor que impulsa y permite que podamos hacer muchas cosas. Participamos en un proyecto europeo con la Mancomunidad de la Comarca de la Sidra, con Escuelas de Música Tradicional, con países como Finlandia, Italia, Francia y Portugal. Un aprendizaje muy interesante de intercambio de cultura, conocimiento y formación. Participamos todos los años en encuentros en Miranda do Douro (Portugal) con quienes estamos hermanados. Y luego, hacemos intercambios con otros grupos folclóricos de Mallorca, Tenerife o Vigo, además de participar en distintes fiestes de prau o festivales folclóricos.
-Recientemente, también participaron en la edición de un libro.
-Sí, participamos en la edición de «Los mineros de Bimenes» de Juan Fernando Rodríguez Calleja (Juanfer), exdirector del Colegio Público Martínporra y también en la presentación del mismo, con el sonido de las gaitas. Se hizo el día 1 de abril y asistieron la presidenta de Hunosa, el académico de la RAE Salvador Gutiérrez, también yerbato que hizo el prólogo del libro, el alcalde de Bimenes, el cronista y el que fuera director de la Nueva España, Melchor Fernández, además de seiscientas personas que abarrotaron el lugar. Y eso es para sentirse orgullosos. Fue un acto muy emotivo.
«Empezaron niñas y niños como una actividad extraescolar de asturiano y hoy somos cerca de cincuenta personas en la Asociación»
-Desde el principio, participan en la asociación todas las generaciones de una forma natural.
-Sí, aquí colabora gente de todas las edades. Siendo una población tan pequeña, no llegamos a los dos mil habitantes, participan en Los Yerbatos cerca de cincuenta personas. Creo que es un ratio importante en relación a otros concejos con más población.
-También fueron los encargados de hacer la ofrenda a la Santina el pasado año. ¿Qué supuso para ustedes?
-Que el 8 de septiembre, Día de Asturias, nosotros estuviéramos allí haciendo la ofrenda a la Santina era algo impensable y fue un gran honor para todos. El cronista fue el encargado de leer el pregón y nosotros como asociación, hicimos la ofrenda del ramo típico de la zona.
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