Érase una vez una capilla antigua, la de San Diego en Bimenes, en la que el tiempo había hecho estragos, hasta tal punto que ni siquiera los mayores la recordaban en pie. Así era en el año 2003. Cinco años más tarde, la renovada Capilla de La Fontanina forma parte del patrimonio local. La hazaña se debe a la iniciativa de un grupo de mujeres del concejo, cuyo esfuerzo llevó el proyecto adelante muy poco a poco y con aportaciones vecinales. A partir de entonces, San Diego tiene capilla, una asociación que lleva su nombre, un premio y una fiesta en su honor. Ahí es nada.
El proyecto sirvió para unir fuerzas y generar lazos. La fiesta de San Diego, el tercer domingo de julio, es la celebración del espíritu comunal de la asociación, presidida actualmente por José Manuel Vega Luces. Es un evento en el que todos se vuelcan, y se aprovecha la ocasión para organizar distintas actividades: el viernes, campeonato de tute. El sábado, fiesta infantil, en el transcurso de la cual se entregan los premios de uno de los eventos más aplaudidos, el Concurso de Dibujo Infantil, que este año va por su undécima edición y tendrá como tema de inspiración «la mina y los mineros», algo muy vinculado a a historia de Bimenes. Para cerrar el fin de semana, el domingo es la fiesta propiamente dicha, con actuaciones de grupo de gaitas local, reparto del bollo y botella de vino, y buen ambiente garantizado durante toda la jornada. 
El último premio San Diego fue para las empresas de embutidos locales por su labor en la promoción del concejo.
Tradicionalmente se reconoce la labor desarrollada en el ámbito cultural -los recibieron personalidades como Salvador Gutiérrez, miembro de la Real Academia Española, o Luis Miguel Montes Arboleya, recientemente nombrado cronista oficial de Bimenes, entre otros- pero en la última edición se amplió el espectro y se entregó la placa conmemorativa a tres empresas de embutidos ubicadas en el concejo: El Pedregal, La Vega de San Julián y Cuello. Todas ellas promocionan el concejo a través de la comercialización de sus productos, y gracias a ellas cada vez más el nombre de Bimenes se vincula al del embutido de calidad.
El último premio San Diego fue para las empresas de embutidos locales, por su labor en la promoción del concejo.
A nivel interno, la asociación tiene sus propias actividades, porque «para nosotros es muy importante fomentar la unión y la convivencia entre vecinos, invitando a la gente mayor, que casi nunca se desplaza a otras actividades como la fiesta de San Diego», explica Vega. La última fue una espicha el 3 de marzo, aprovechando que Mable Vallina -muy querido en la zona, premio San Diego en 2014- plantó un texu al lado de la capilla. «Grupo, tertulia y unión entre los vecinos, una jornada muy guapa», concluye el presidente de la asociación.