El pueblo de Berodia se prepara para acoger el sábado 14 de octubre el III Festival Comunitario Cabrales de Pueblo en Pueblo. Un evento que visibiliza las tradiciones populares y el trabajo de las asociaciones vecinales por mejorar su entorno.
Las ediciones anteriores de este festival, que se celebraron en Arenas y Carreña con el apoyo y recursos comunitarios de estos pueblos, dejaron un buen sabor de boca, y la aldea de Berodia recoge ahora el testigo de este evento que dice mucho de lo que puede lograr la unión vecinal a la hora de emprender proyectos en su entorno.
El Festival es el escaparate final del proyecto Cabrales de Pueblo en Pueblo impulsado por el Ayuntamiento cabraliego desde el año 2021, y a través del cual pretende facilitar la participación de los vecinos en iniciativas para mejorar los pueblos.
Aunque el Festival tiene lugar el día 14, todo el que lo desee puede participar el día anterior en el adobejo decorativo. Sin duda una buena forma de ir conectando con una festividad en la que prima el trabajo y la diversión en común.
En realidad, esta fiesta comunitaria es el escaparate final del proyecto ‘Cabrales de Pueblo en Pueblo’ impulsado por el Ayuntamiento cabraliego desde el año 2021 y a través del cual pretende facilitar la participación de los vecinos en iniciativas para mejorar los pueblos.
Además de los puestos de asociaciones y empresas no faltan los pasacalles y el sonido de las gaitas acompañando diferentes momentos de la jornada.
En esta ocasión el peso del proyecto recae sobre un grupo de vecinas que, con mucho cariño, llevan meses organizando la agenda del festival y que están decididas a hacer bueno el dicho de que “en Berodia todo mejora”.
La jornada empieza fuerte, y para los más madrugadores hay programada una salida a las 8:30 de la mañana desde Poo que recorre la ruta de la Prehistoria hasta llegar a Berodia.
El resto del día también promete con actividades de lo más diverso. Además de los puestos de asociaciones y empresas no faltan los pasacalles y el sonido de las gaitas acompañando diferentes momentos de la jornada. También juegos y deportes tradicionales como el tanganu, la pita ciega, el aeroplano o las cabruxas; el tiro de cuerda o las carreras de sacos y una yincana por equipos pondrá a prueba la coordinación y las habilidades, entre risas y buen ambiente.
El Festival pretende ser también un humilde ejemplo de buenas prácticas en la sostenibilidad.
No faltará un guiño al arte gracias a actividades de poesía y pintura, y la Asociación Corri Corri nos sumergirá en el canto y el baile folclórico. La comida popular, un concurso de cocina, una zona abierta al trueque y otras muchas cosas están incluidas en una programación pensada tanto para niños como para adultos.
Además, el Festival pretende ser también un humilde ejemplo de buenas prácticas en la sostenibilidad y para ello facilitará alternativas de transporte en grupo, premiará a aquellas personas que se desplacen al evento con medios sostenibles y ofrecerá vasos reutilizables que posteriormente podrán ser utilizados por los pueblos que los demanden para sus fiestas.