Tras un paréntesis, vuelve la gerencia de siempre al Prau La Chalana. Ana María Paredes, junto a sus hijos Emilia y Daniel, se ocupan de ofrecer el mejor servicio, con diferentes propuestas adaptadas al cliente.
El Prau La Chalana es un lugar emblemático, el punto donde termina el Descenso Folklórico del Nalón, y donde se celebra la Jira de Laviana que cierra las fiestas locales.Un inmenso «prau» que pertenece a este restaurante y hotel, y que permite que los niños puedan jugar durante su estancia, con toda la tranquilidad para los padres.
El establecimiento está ubicado en Entrialgo, muy cerca de la Casa-Museo y Centro de Interpretación de Armando Palacio Valdés. Por eso, y aprovechando esta situación estratégica, desde el Prau La Chalana planean ofrecer paquetes turísticos que incluyan alojamiento, restauración y una ruta cultural basada en la figura de Palacio Valdés.
Actualmente ofrecen la posibilidad de alojarse en un hotel con encanto y de comer en un restaurante de cocina tradicional con toques innovadores, que incluye además platos de parrilla clásica. Todos los días preparan un menú con tres primeros platos y tres segundos, al precio de ocho euros; el jueves además se ofrece un menú especial, al mismo precio, que incluye entre estas opciones un arroz caldoso con marisco de primero y unos cachopines en salsa de uvas de segundo. Y para los fines de semana hay menús especiales, el sábado por la noche y el domingo, por 18 €.
Además del «prau» que le da nombre, el restaurante cuenta con una amplia terraza abierta durante todo el año, que complementa a los dos comedores interiores. Esta capacidad le permite adaptarse tanto al servicio a clientes individuales como a la organización de bodas, banquetes y celebraciones en general.