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lunes 2, diciembre 2024

Arte e innovación. Rinaldo Alvarez. Creador de joyas

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Siempre ha sentido por el arte un interés precoz. A los ocho años comienza a pintar al óleo y a los diecinueve entra en el mundo de la joyería. Era una manera de hacer dibujo, escultura y pintura a la vez. Hoy es un creador de joyas artísticas reconocido internacionalmente.

Su tendencia a la experimentación artística se aletargó los primeros años, durante los cuales hizo joyería comercial que dejaba traslucir cierto toque de originalidad. Desde hace tres años contactó con grupos internacionales de joyería artística y ha desarrollado una carrera en ese ámbito, de mano del reconocido Ramón Puig Cuyás.

-¿Qué característica ha de tener una pieza para ser considerada como «joya creativa»?
-Aunque nunca es grato etiquetar, todos sabemos que a veces es necesario hacerlo para ubicar un poco al profano. Las obras que expongo en Barcelona y Europa están dentro de una corriente que comenzó allí en los años 60, y que se enmarca bajo varias definiciones como las de «Joyería Artística», o «Joya de Investigación». Implican su naturaleza artística y a la vez el componente de descubrimiento que para el propio creador suponen, y asimismo la diferencian del diseño puro, o de la joyería más ligada a la moda.

«Intento desvelar cómo se comunican los materiales»

-¿Avanzar en su trabajo supone innovar en nuevas técnicas de joyería, y en investigación de metales?
-Investigando son más los fracasos que los aciertos. Es más importante para mi desarrollo intentar desvelar cómo se comunican los materiales y las formas entre sí, y cómo ese diálogo llega a nosotros. Investigar sin restricción en los materiales para poder crear un lenguaje que se aproxime al espectador, y le llegue.

Sea Flower, creación de Rinaldo Alvarez.
Sea Flower, creación de Rinaldo Alvarez / Foto: Juanma

¿Tiene preferencia por alguna gema en particular para su trabajo?
-Creo que no tengo ni siquiera una única comida favorita, o un solo color favorito…pero sí siento una especial predilección por las perlas debido a su romanticismo, sensualidad, su relación con Oriente, su expresividad tan íntima…

-¿Cuándo una joya deja de lucirse para pasar a exponerse?
-Lo que se expone es un tipo de expresión artística, que utiliza como soporte el cuerpo humano. Esto es lo que hay que entender. Una obra de arte no deja de serlo porque se le ponga detrás un cierre para llevarla en la ropa. Al igual que un cuadro no es siempre una obra de arte porque se le ponga un marco. La joya tiene esa idiosincrasia tan especial que hace que pueda estar tanto en una vitrina en un museo, como en el pecho de una mujer. Y ser una obra de arte en los dos casos.

-¿Cuál es la base de su última colección?
-Aunque siempre retomo de alguna manera el lenguaje de la serie «Bikes», que para mí es muy personal, a la vez voy encontrando nuevas materias para comunicar. Ahora mismo estoy un poco dividido entre dos series diferentes. Una tiene que ver con lo particular como base de un lenguaje universal, en la que utilizo cristales encontrados en la playa y fotografías personales. En la otra serie experimento con alambre y una resina modelable, para crear yo mismo las formas que necesito y dar aspecto de combinar piezas cerámicas con la plata. Con esta combinación hice varias piezas para una exposición conjunta en Barcelona sobre «Lo secreto» comisariada por Silvia Waltz. Con esos materiales estoy preparando otras obras que espero tener para la exposición de Vegadeo.

-Participa en importantes exposiciones internacionales de joyería. ¿Son estos encuentros fuentes de inspiración en el trabajo de los demás o se trata de ser original?
-El último encuentro fue en noviembre 2008 en Amsterdam, la meca de la Joyería Artística de Vanguardia, donde acudí con Lucas Santiago, otro asturiano con el que comparto inquietudes. Allí te das cuenta de que cada uno intenta desarrollar un lenguaje propio que lo identifique y que pueda hacerse leer por un público. No se pretende ser original por el mero hecho de llamar la atención, sino de ser auténtico en tu expresión, de que tu trabajo sea una parte verdadera de ti.

Fear of the Near, creación de Rinaldo Alvarez. Foto: Kike Llamas
Fear of the Near, creación de Rinaldo Alvarez / Foto: Kike Llamas

-¿Qué le supuso ser el único asturiano presente en el libro «Compendium Finale of Contemporary Jeweller Makers»?
-Lo más importante para mí de la aparición en esta publicación, es el hecho de que la selección haya sido hecha por artistas europeos reconocidos a nivel internacional. Aparte de aparecer en el mismo libro que algunos de los artistas cuyo trabajo durante mucho tiempo he estado admirando, también se añade el hecho de que será una publicación que irá destinada a galeristas, museos y coleccionistas de todo el mundo.

-¿Qué particulares características encuentra en Vegadeo para desarrollar su trabajo?
-Aquí encontré siempre, y desde el principio, un tremendo apoyo desde las instituciones, y sobre todo de la gente de Vegadeo y de toda la comarca. Estoy conmovido y agradecido, es un lugar con mucho mérito. Un lugar que resiste unas condiciones muy duras, tanto climáticas como de localización, y que sin embargo sostiene una gran actividad cultural y comercial. Siempre podré decir que mi carrera profesional artística comenzó desde aquí. §

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