Piantón, o el encanto del Occidente profundo

En los límites con Galicia, este rincón vegadense, antigua capital del concejo, siempre ha tenido un carácter propio. El suyo. El piantonés.

Se encuentra a escasos dos kilómetros de Vegadeo, el núcleo que concentra la mayor población del municipio. Pequeño y recogido, cuenta con una arquitectura tradicional que mantiene la esencia local, con construcciones de dos plantas y corredor típico. Se dice que desde siempre los piantoneses tienen un gran sentido de la colectividad, y están habituados a trabajar en bloque. Como ejemplo, es imprescindible citar que aquí se celebran rituales colectivos tan trascendentes como la Semana Santa, que requiere la participación de todos los vecinos y que ha logrado convertirse en la referencia de la zona occidental. Y es que llama la atención que en un lugar como éste, alejado de los grandes núcleos de población y de las liturgias pomposas, se haya mantenido durante tantos años una celebración sencilla pero muy cuidada, ejemplo de devoción y también de la tenacidad vecinal. La Semana Santa piantonesa saca a la calle sus originales figuras articuladas que reproducen los hechos centrales de la Pasión. La riqueza del conjunto, el gran número de escenas representadas y el numeroso público son un importante tirón turístico y animan a pelear por que se la considere Fiesta de Interés Turístico Regional.
Además, en la agenda del visitante hay dos fotografías que no pueden faltar. La primera, el puente romano sobre el río Suarón, que sale al paso según se llega, convenientemente reformado en el tiempo; sus pilares han sido recientemente reforzados, para paliar los daños que las riadas sucesivas han ido produciendo en la estructura. También cabe una visita a la Iglesia de San Esteban, uno de los orgullos locales, antiguo monasterio fechado en el siglo XII que llegado el verano es escenario de los conciertos organizados en el marco del Festival Internacional de Música de Piantón.Pinche aquí para ver más reportajes de este concejo