En el reconocimiento logrado por la sidra asturiana tiene mucho que decir el Consejo Regulador Sidra de Asturias, una entidad que lleva muchos años trabajando en la excelencia de esta popular bebida.
Tras una dilatada experiencia empresarial, Daniel Ruiz ocupa desde hace tres años la gerencia de este organismo asturiano que agrupa a un importante número de productores de sidra.
-¿Qué productos podemos encontrarnos con la etiqueta DOP Sidra de Asturias?
-Actualmente tenemos tres tipos de producto: sidra natural tradicional, sidra natural filtrada y sidra natural espumosa. Pidiendo “la etiquetina”, “la auténtica”, apostamos por lo nuestro, ayudando a crear riqueza y empleo en el entorno rural, manteniendo nuestro patrimonio (las pumaradas). La sidra natural tradicional es más que un producto, es la seña de identidad de nuestra región, es nuestra forma de vida, nos gusta decir que es única en el mundo por cuatro razones: en primer lugar por su forma milenaria de elaboración artesanal. En segundo lugar, por su icónica forma de servicio (el escanciado) y la presentación del producto (molde hierro). En tercer lugar por su forma de consumo, en muchos casos compartiendo con amigos. Y en cuarto lugar, porque su origen natural garantiza al consumidor que ha sido obtenida mediante prácticas ambientalmente sostenibles. Esta cuestión se ve reforzada a través de su singular sistema de reciclado de envases.
La natural filtrada (de nueva expresión) es una sidra natural que se sirve en copa sin necesidad de escanciado y a una temperatura entre 8 y 10 grados conservando la esencia de la sidra más tradicional.
La sidra natural espumosa presenta un carbónico natural propio producido durante un proceso de segunda fermentación, debiendo servirse a una temperatura de entre 6 y 8 grados, de modo que su elaboración y servicio se ajusta al de otros espumosos de calidad.
-Actualmente tienen 34 lagares adscritos y alrededor de 353 cosecheros integrados en la Denominación de Origen. ¿Cómo valora la evolución de la implantación de la DOP?
-La DOP Sidra de Asturias está de récord. En los tres últimos años prácticamente hemos triplicado las ventas fruto de las acciones promocionales realizadas. Pero no debemos ser conformistas ya que representamos aproximadamente el 15% de las sidras naturales tradicionales y soñamos con que en unos años el 50% se elaboren con manzana 100% asturiana, es decir con el amparo de la DOP. El objetivo es que la mayor cantidad de manzana asturiana se destine a DOP, que aporta un mayor valor añadido a toda la cadena.
“El potencial turístico que ofrece la manzana y la sidra en nuestra región es enorme”
-El pasado mes octubre, el Consejo Regulador obtuvo el premio en la categoría ‘Proyección de Asturies en el exterior’ que otorga el diario El Comercio. ¿Qué reconocimiento tiene la sidra asturiana fuera de nuestras fronteras?
-La sidra es sin duda nuestra imagen fuera de Asturias. No hay región en el mundo con la experiencia y el saber hacer de nuestro sector. Somos el segundo país productor de sidra en Europa pero hace falta más promoción para dar a conocer “la cultura sidrera asturiana”. El reconocimiento por parte de la Unesco a la candidatura sería un espaldarazo a nuestro sector y a la imagen de la “marca Asturias”. Es básico fortalecer el mercado regional y paralelamente trazar una estrategia de acciones para acceder a un mercado más amplio, más diversificado, de mayor valor añadido. El término “Glocal” es muy gráfico: búsqueda de mercados globales atendiendo a lo local.
-¿Qué tendencias de consumo y producción se observan en el sector?
-La sidra está de moda y se estima un crecimiento sostenible a medio plazo del 6% anual. Las tendencias de consumo en el mundo apuntan hacia la obtención de productos saludables, sin gluten, con menor contenido en azúcar, ecológicos, con sabores, de baja graduación alcohólica, por lo que la sidra, en general, reúne estas cualidades. Además, vemos que los lineales de los supermercados dotan de espacios más amplios a la sidra. Es sin duda una oportunidad para el sector de la sidra en la que grandes grupos cerveceros ya están trabajando. Desde el Consejo Regulador vamos a ampliar nuestro catálogo de productos certificados al Vinagre de sidra y a la Sidra de hielo elaborados siempre con manzana 100% asturiana. Es necesario valorar el uso de otros formatos más reducidos en la presentación de los productos (latas, botellines, etc.) adecuándonos a las nuevas tendencias en un mercado cada vez más global, y desde Asturias tenemos que dar respuestas aprovechando nuestra experiencia, calidad y saber hacer.
-En el Salón Internacional de las Sidras de Gala pudimos ver productos como la sidra seca sin gas, sidra de hielo… ¿Cómo repercute en la visibilización de la sidra el aumento de la diversidad?
-Siempre es bueno ver qué tendencias y hábitos de consumo hay en otros países. Está claro que tenemos que apostar por la diversificación de productos, por seguir innovando y por satisfacer las tendencias de consumidores que demandan productos de calidad, cada vez más saludables y que les ofrezcan nuevas experiencias. Con la Sidra de Asturias las tienen aseguradas. El potencial turístico que ofrece la manzana y la sidra (Sidraturismo) en nuestra región es enorme para lo cual es fundamental confeccionar una estrategia a largo plazo tal y como ha hecho el sector vitivinícola en otras regiones.
-Llegan unas fechas muy especiales para la gastronomía, con reuniones familiares, de amigos… ¿Qué papel juega la sidra en las mesas navideñas?
-Desde el Consejo Regulador apostamos fuerte por las sidras naturales espumosas, un producto natural, con manzana 100% asturiana y de baja graduación alcohólica. El principal reto es desestacionalizar su consumo e intentar que la Sidra de Asturias esté presente en las cartas de los restaurantes y sea demandada en otros momentos cotidianos como en los aperitivos, afterworks, etc.