En una tierra de mercados tradicionales, probablemente éste es de los más esperados por su situación en el calendario. La Primera Flor hace referencia a la llegada de la primavera, y casi parece que no pueda haber una sin la otra. Tras meses de frío, apetece salir, mirar, probar, comprar… dónde mejor que en Grado.
La Primera Flor es una fecha especial y distintiva de Grado, y por eso se ha solicitado al Principado de Asturias que se declare Fiesta de Interés Turístico Regional. «Es una espinita que tenemos clavada, porque estamos muy convencidos de la importancia de esta Primera Flor», reconoce el Concejal de Turismo José Manuel Puente. «Es la tercera vez que presentamos la candidatura, y esperamos que el dicho se haga realidad: que a la tercera vaya la vencida».
Para facilitar aún más la asistencia, se habilita de nuevo -tras el éxito del año anterior- el conocido como Tren de la Flor, un transporte especial que comunica Oviedo con Grado.
Desde fuentes municipales se calculan unos 5.000 visitantes en este día, tanto de Asturias como de fuera. No hay que ser un experto estadista para reconocer lo evidente caminando por las calles de la villa: la Primera Flor es un evento multitudinario. Para facilitar aún más la asistencia, en esta ocasión se habilita de nuevo -tras el éxito del año anterior- el conocido como Tren de la Flor, un transporte especial de Feve que comunica Oviedo con Grado, recordando al trayecto que hacía en los años treinta. Los vagones están preparados para la ocasión y el viaje, de poco más de media hora, se ameniza con gaita y tambor y pasajeros ataviados con los trajes típicos. Quienes opten por viajar en el Tren de la Flor podrán participar en el sorteo de noches de alojamiento y comidas gratuitas, ofertadas por ditintos establecimientos de la villa y el concejo.
La faba, con certificación de calidad
Además, explica la Concejala de Mercados Ambar Álvarez, desde hace siete años se organiza el Certamen de la Faba Asturiana, junto al Consejo Regulador: «Por eso la faba que se vende en este mercado es faba auténtica asturiana certificada y de una calidad inmejorable. Se vende envasada por kilos».
En este Certamen los productores ponen a la venta sus cosechas y participan en una cata en el Restaurante Feudo Real. Este tipo de actividades son necesarias para divulgar un producto muy prestigioso, pero aún desconocido. «En este terreno hay mucho intrusismo, porque la faba asturiana es muy conocida. Pero no toda la que se vende como tal está dentro de la IGP, muchas veces ni siquiera es asturiana. Nosotros queremos que el consumidor tenga la información, para que luego pueda decidir en función de sus intereses y su bolsillo, pero que sepa lo que compra». Así opina Juan José Menéndez, presidente del Consejo Regulador, organismo que tiene precisamente su sede en Grado.
Una de las novedades de esta edición es la organización de un Show Cooking, que coordina la Escuela de Hostelería del IES Valle de Aller. Segundo Riesco es su responsable: «Vamos a preparar entre dos y cuatro recetas, combinando cocina tradicional con otra más novedosa. No será esa cocina de moda que se ve en televisión, pero tampoco vamos a enseñar a nadie a hacer una fabada; buscamos algo intermedio, que permita que la gente vea a los alumnos trabajar y que quien quiera se pueda llevar la receta a casa».
La Escuela intenta siempre trabajar con marcas de calidad, como es el caso de la IGP Faba Asturiana, «que tiene muchísimas posibilidades más allá de los platos tradicionales. Se puede elaborar en ensaladas, en escabechados, con verduras…». Habrá que ir a la Primera Flor para probarlo.