La crisis sanitaria nos ha enseñado que debemos encauzarnos hacia un turismo más sostenible, menos masificado y respetuoso con el medio ambiente. Navia se ha adaptado este verano a los tiempos que vivimos y se anuncia como destino atractivo y seguro, un hecho que ha animado las reservas de los alojamientos del concejo: el visitante busca naturaleza, espacios abiertos, disfrutar el mar y la montaña y el encanto de los pueblos pequeños. La geografía naviega es un abanico casi infinito de posibilidades para descubrir.
El turismo rural y de naturaleza ha despegado con fuerza. Si el mes de julio sorprendió favorablemente, el de agosto se espera aún mejor gracias al incremento de la tasa de ocupación. Alojamientos de calidad en entornos saludables, lejos de la masificación y en plena naturaleza, han demostrado ser el refugio perfecto para disfrutar del placer vacacional en esta ‘nueva normalidad’ a la que todos debemos de acostumbrarnos.
Navia da mucho pero también se queda con algo del que la visita y la disfruta. Por eso cuanto más se la conoce y se la recorre, uno se da cuenta de que aún le quedan cosas por descubrir como la Senda Costera de Navia, uno de sus mayores atractivos. En esta ruta espectacular que transcurre por la línea costera del concejo podemos encontrar acantilados que te dejan sin aliento, playas de finas arenas, recónditos pedreros, bosques, riberas y miradores desde donde admirar panorámicas y puestas de sol que enamoran.
Este recorrido parte de la capital del concejo, llega hasta la playa de Barayo y se puede realizar en cualquiera de los dos sentidos. “Yo recomendaría comenzarlo por la playa de Barayo, Reserva Natural Parcial de la Biosfera”, comenta Ignacio García Palacios, alcalde de Navia. “Invito primero a visitar aquella zona maravillosa para luego continuar hasta Puerto de Vega, un lugar cargado de historia que podemos conocer de primera mano recorriendo sus calles y luego visitando el Centro de Recepción Historias del Mar y el Museo Etnográfico Juan Pérez Villamil, ambos situados en el edificio donde está la Biblioteca Jovellanos. Un espacio al que recientemente se ha sumado una imprenta artesanal de finales del siglo XIX en perfecto funcionamiento. Máquinas antes pertenecientes a Luis Díaz, imprenta Gondi, que recientemente acaba de adquirir el Consistorio. Todas están revisadas y funcionan a la perfección, hasta el punto de que el visitante además de conocer el proceso de impresión puede salir con un pequeño texto personalizado. Tenemos la ventaja de que ‘Gondi’, como le conocemos popularmente, será quien realice demostraciones con estas máquinas que han estado en activo en su imprenta hasta hace tan solo unos meses”, explica el regidor.
En esa visita por Puerto de Vega podemos aprovechar para conocer la casa donde falleció Jovellanos, la primera aduana de Asturias, un magnífico retablo barroco o caminar por sus calles, parque o puerto porque aquí las piedras hablan y los miradores inspiran, y desde sus atalayas se divisan hermosas panorámicas del pueblo y de la costa.
La playa de Frejulfe es ideal para hacer surf por sus olas perfectas. Este año, como viene haciendo desde 2017, vuelve a lucir la bandera azul
Seguimos la ruta y tras recorrer unos cuatro kilómetros llegamos a la playa de Frejulfe, declarada Monumento Natural y joya de las banderas azules en Asturias. Desde que en 2017 entró en la lista de arenales galardonados, ha conseguido mantener este distintivo que garantiza la calidad de sus aguas, limpieza, servicios y belleza del litoral. Este hermoso arenal rodeado de bosques de pinos y eucaliptos está abierto al mar y orientado al norte, lo que garantiza olas perfectas para la práctica del surf. La playa es amplia y ofrece espacios variados para disfrutar de diferentes actividades.
La senda continúa a través de varias playas hasta llegar al Mirador del Monolito en Navia desde donde podemos divisar la playa semiurbana de la capital del concejo, con bastante ocupación en época estival.
La ruta atrae de manera multitudinaria a los amantes del deporte con dos citas que se han hecho muy populares en el calendario veraniego: en junio, la tradicional Travesía Internacional de la Costa Naviega, organizada por el Grupo de Montaña Peña Furada que llega a reunir a cerca de dos mil senderistas venidos desde todos los rincones de la geografía, y en septiembre, el Trail Senda Costera Naviega que en 2019 celebró su cuarta edición. La senda costera es muy polivalente, se puede hacer caminando o en bici, y además de ser un reto deportivo, cada día la recorren por tramos numerosos visitantes que, de forma tranquila, quieren disfrutar de este regalo de la naturaleza.
Desde la playa de Navia podemos acceder al Paraje Natural de La Poza también denominado Vega de Arenas. Este pequeño lago, influenciado por las mareas, es lugar de parada de miles de aves cada año y está rodeado de un bosque de pinos y eucaliptos. El enclave medioambiental es ideal para pasear, relajarse, hacer deporte o simplemente disfrutar sin más. Este rincón de la villa que aúna bosque, poza y mar es algo único en Asturias.
La zona dispone también de un área recreativa con merenderos, lugares de sombra, parque infantil y baños públicos. En las inmediaciones también encontramos bares y terrazas que convierten a este lugar en una de las zonas de ocio preferidas de los naviegos.
Una ría, un pueblo
Desde la antigüedad, los seres humanos han buscado establecerse cerca de las aguas. Los ríos han constituido una importante fuente de riqueza, convirtiéndose en ejes de transformación socio-económica de los pueblos. El Navia, el segundo mayor caudal de toda la orografía asturiana, desemboca creando un extenso estuario en el concejo. Sus aguas, navegables, han sido fundamentales en el desarrollo de este territorio que siempre ha vivido de cara a la ría y que no entiende la vida sin este curso fluvial.