Cuando estas líneas se escriben estamos aún en plena resaca electoral, asimilando los resultados y haciéndonos una composición de lugar de cómo quedan las cosas. Son muchos datos que analizar y en realidad uno sólo que digerir: la ciudadanía ha pedido un cambio.
La temporada alta para el turismo comenzó el mes pasado, en una Semana Santa tardía que nos tuvo a todos con el corazón en vilo: que si llueve, que si no llueve, con todo lo que eso supone para las cancelaciones de última hora.
Durante el pasado mes el mundo vivió pendiente de lo que sucedía en la central nuclear de Fukushima. Y todavía seguimos, porque aún no está nada claro que la situación esté bajo control.
El anuncio del cierre de las minas en 2018 ha sido un mazazo para la ya maltrecha economía tradicional asturiana. Tras una reconversión de la siderurgia que aún colea, decir adiós a la minería es despedirse de una forma de vida que durante años ha definido a esta región, en un cambio que promete ser duro.
Nos esperan unos tiempos movidos, políticamente hablando. Quedan tres meses para las próximas elecciones, y ya se nota en el ambiente que las distintas partes calientan motores y, con alguna sorpresa, comienzan a copar los medios de comunicación con batallas internas, preparando el terreno para las urnas. Y eso, a estas alturas, nos preocupa.
¿Quién nos iba a decir que llegaríamos a soplar una tarta con 200 velas?
Desde luego, cuando este proyecto comenzó a tomar forma en el año 1994, ninguno de los que nos embarcamos en la aventura habría asegurado que, 17 años después, aquí seguiríamos.
Lo primero que caracteriza a un ganador es la confianza en sí mismo y en su proyecto, sea el que sea. Después, inmediatamente después, tendríamos que hablar del tesón, del esfuerzo, del sacrificio, del trabajo constante. Armas todas sin las cuales es imposible lograr los retos trazados.
Cada vez tenemos menos habitantes, y cada vez están más concentrados en las mismas áreas. Es una tendencia que, lejos de variar, se hará más pronunciada en la próxima década, según anuncian las estadísticas y los que se dedican a estudiarlas y a elaborar pronósticos.
La temperatura de la comunidad sube progresivamente, al margen de que el calendario marque el fin de los calores y la llegada paulatina de las mañanas frescas y los atardeceres de mangas largas.
Imaginación. Creatividad. Interés. Experimentación. Al fin y al cabo ¿no es la curiosidad natural lo que ha hecho evolucionar a la humanidad desde el origen? La historia ha avanzado según se daban pasos en conocimiento y su aplicación para mejorar la supervivencia y la calidad de vida. Hoy hablamos de Investigación, Desarrollo e Innovación.