El Gobierno de Principado, en colaboración con la Universidad de Oviedo, presentó hace unos años este plan. Sus objetivos estaban claros: atenuar e invertir el proceso de envejecimiento y declive demográfico, avanzar en la corrección de los desequilibrios demográficos territoriales que existen a nivel interno y atender las necesidades de la población derivadas de la situación presente y futura. La estructura de la estrategia de intervención está compuesta de siete ejes:

Diversificación económica y Tics. Una coyuntura económica favorable y un empleo estable y de calidad favorece que las familias se asienten, así que en este punto se contemplan varias acciones como destinar más de cien millones de euros a desarrollar acciones de formación, cincuenta y seis millones a la mejora de las explotaciones agrarias, así como la creación, mejora y ampliación de las infraestructuras de banda ancha e Internet de alta capacidad.
Igualdad de oportunidades, conciliación y corresponsabilidad para las familias. Para tener descendencia se necesita, entre otras cosas, facilidad para conciliar, una garantía de igualdad, fomentar la corresponsabilidad y favorecer la igualdad de oportunidades en el empleo. Para ello algunos de los puntos plantados han sido un avance en la oferta de Escuelas de Educación Infantil de 0 a 3 años, destinar catorce millones de euros para fortalecer los Centros de Atención Temprana o apoyar económicamente a las familias en situación de vulnerabilidad.
Envejecimiento. Partiendo de la base de que este es uno de los grandes retos demográficos de todos los países desarrollados, algunas acciones del Plan pasan por ampliar la cobertura en los centros de día, reforzar la asistencia a domicilio con más de 126 millones de euros o fomentar el voluntariado entre las personas mayores y desarrollar programas que potencien la transferencia del conocimiento intergeneracional.
Relevo generacional. Viendo la estructura población actual y las tasas de natalidad y fecundidad actuales este eje contempla entre otras medidas promover la parentalidad positiva en los procesos de adopción o establecer incentivos al nacimiento o la adopción en municipios rurales.
Política migratoria. Para ello se proponen algunas acciones como el retorno del talento al Principado destinando fondos superiores a los 6,6 millones de euros o afianzar los programas de contacto de la población emigrante con la región.
Equilibrio territorial. En Asturias, la mayor parte de la población está concentrada en la parte central, siendo las “alas” donde se concentra el problema de la despoblación y el envejecimiento de la población. Este punto contempla medidas centradas en el reequilibrio territorial a través de acceso a servicios, equipamientos e infraestructuras de calidad en todo el territorio o fomentando la actividad social y económica en toda la región.
Adaptación al cambio. Se parte de la base de que ya estamos inmersos en un cambio generacional y que estamos viviendo sus consecuencias. Para ello son necesarias acciones concretas como incrementar las ayudas para la incorporación de jóvenes al medio rural, promover Consejos de la Juventud y apoyar el movimiento asociativo juvenil, crear la comisión de seguimiento del Plan Demográfico, así como incluir la perspectiva demográfica en todos los planes y proyectos impulsados desde el gobierno asturiano.