Más de sesenta años de historia del Club Náutico Remeros del Navia dan para mucho: épocas de impulso, años de parón, resurgimiento… Muchos de ellos los ha vivido Javier Fernández, que es el actual Presidente y alma de este Club. A pesar de su pequeño tamaño, este colectivo está ofreciendo grandes regatas a los aficionados, consiguiendo medallas en varias categorías. Además, son los únicos en Asturias que cuentan con una tripulación femenina en la categoría de adultos.
-¿En qué categorías trabaja actualmente el Club?
-Ahora mismo estamos con alevines, infantiles, y este año tendremos también cadetes. Y por supuesto están los veteranos y veteranas.
-El equipo alevín ha sido campeón de Asturias en la modalidad de cuatro scull por segundo año consecutivo. ¿Qué ha significado este logro para el club?
-Y además acabamos de llegar del Campeonato de España, que se celebró en Banyoles (Girona), y nuestro equipo quedó quinto. Entrar en la final ya es un logro muy grande, pero es que además fue una regata apretadísima: los seis participantes llegaron a la meta con un margen de cinco segundos, así que nosotros quedamos contentos. Creo que está demostrado que tenemos una tripulación muy buena.
-Al trabajar con jóvenes, ¿se nota que el secreto es la formación?
-Desde luego. En este caso concreto, el equipo entrena junto desde alevines (categoría que comprende entre diez y doce años), y eso es algo que da mucha ventaja a la hora de ir subiendo categorías. Si empiezas con trece o catorce años, posiblemente sea tarde. A esto se suma que estamos viendo que tienen nivel, así que creo que en ese equipo hay futuro.
-¿Cómo es la afición naviega?
-La verdad es que este deporte no es multitudinario, en general si vas a las regatas en Asturias ves que el público está compuesto básicamente por amigos y familiares. Nosotros somos el club deportivo más laureado de Navia, tenemos varias medallas nacionales, y un montón de Campeonatos de Asturias, pero la realidad es que aquí hay otros deportes que tienen mucha más afición, probablemente el más seguido sea el baloncesto.
-¿Cómo se podría impulsar este deporte en la zona?
-Como en todo, ahí influye mucho la economía. Éste es un deporte muy caro: como ejemplo diré que el año pasado compramos una embarcación, un doble skull de un nivel medio, y nos costó 7.500 euros. O ir al Campeonato de España nos ha costado unos tres mil euros. Esos precios condicionan todo. Si el Club tuviera más presupuesto quizá podríamos publicitarnos un poco, o contratar a un entrenador, porque ahora mismo entreno yo con la ayuda de un compañero, pero ambos tenemos nuestras vidas y nuestros trabajos, y hay que compaginarlo todo. Desde hace unos años yo soy el «chico para todo», y hago las veces de presidente, secretario, tesorero, entrenador… lo que haga falta.
-Una de las características del club es que cuenta con el único equipo de veteranas de Asturias. ¿Cómo se puso en marcha?
-En realidad empezó como quien no quiere la cosa, con la llegada de algunas chicas no tanto pensando en remar, sino por hacer algo de deporte, porque nosotros tenemos un pequeño gimnasio. El caso es que, unas por otras, fuimos enseñándoles a remar, y cuando nos dimos cuenta teníamos una tripulación. Participaron en el Campeonato de Asturias y eran las únicas en su categoría, así que lógicamente quedaron campeonas; pero hay que decir que remaron muy bien, hicieron una regata impresionante.
-¿Ha supuesto también un impulso para el Club?
-Claro, nos ha dado muy buen ambiente, y además en la mayoría de los casos con ellas han venido al Club sus maridos y sus hijos, lo que nos favorece a todos los niveles. Y deportivamente, ya te digo, estamos encantados. Ellas están dispuestas a todo, y pienso que esta temporada será muy buena, porque ya van a empezar entrenando, cuando la temporada pasada la empezaron aprendiendo. Tienen muchísima afición y han superado todas las expectativas.
-Parece que los Remeros del Navia están pasando una buena época.
-Hace unos años pasamos una mala temporada, especialmente después de que muriera Miguel Vega, Miguelón. Llevábamos toda la vida juntos en el Club, y nos quedamos un poco huérfanos, y además coincidió con que la mayoría de los chavales que teníamos se fueron a estudiar fuera… casi me quedé yo solo, estuve a un tris de dejarlo. Pero poco a poco fuimos recuperando, y ahora mismo tenemos la alegría de tener a un montón de chavales, que además es la categoría con la que yo más disfruto, aunque lo cierto es que he entrenado a todos. Y encima tenemos el añadido de las veteranas, así que sí, es un buen momento.
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