A Jesusa, a sus 96 años, le acaban de entregar el galardón de Paisana del Año en su concejo, Riosa, como reconocimiento no sólo a su longevidad -sigue activa y en perfectas facultades, lo que es todo un mérito-, sino también a la labor realizada durante estos años con su familia en el entorno rural. Su cara de felicidad aquel día y la de sus familiares lo decían todo.
Ella pertenece a esa generación de mujeres que trabajaron dentro y fuera de casa. Trabajaron en los campos, los huertos, con el ganado, hacían la comida, las cosas de casa, cuidaban a los niños y la mayoría de ellas no poseían ni un duro que fuera suyo. Y aún así, a muchas de ellas les cuesta identificarse como agricultoras o ganaderas porque a lo mejor nunca se han subido a un tractor, cuando han sido las productoras y las que han sustentado los hogares desde siempre.
Hoy ser mujer emprendedora en el medio rural -y nos lo dicen muchas a las que hemos entrevistado- supone disponer de menos oportunidades laborales, menos acceso a la formación, sufren los efectos de la brecha digital y tienen que enfrentarse a complicados trámites burocráticos. Eso, a la larga, implica un mayor riesgo de vulnerabilidad que se suma al ya de por sí complicado acto de emprender.
En Asturias hay un índice de feminidad muy alto, sobre todo en los municipios rurales. Todas estas mujeres que se están dejando la piel nunca han aparecido ni aparecen en las estadísticas oficiales como mujeres trabajadoras, sólo una mínima parte, a pesar de estar bregando lo suyo en silencio y ser piedras angulares en sus familias.
Jesusa, como tantas otras, forman parte de nuestro árbol genealógico, sin ellas no existiríamos. Porque la realidad es que todos somos rurales desde hace millones de años y gracias a eso hemos llegado hasta aquí; las urbes nacieron como quien dice anteayer. Y como paradoja, ahora nos enfrentamos al abandono y la despoblación del medio rural, nuestra clave de supervivencia. ¿Y si el problema de la despoblación comienza por la falta de atención y la constante discriminación a las mujeres de nuestros pueblos? ¿Qué pasaría si se las pusiera a ellas en el centro? Si falta la mujer, si se niega su papel y su labor, si se limita su acceso al trabajo, a los servicios básicos… se la obliga a emigrar.
Coincidiendo con la entrega del galardón Mujer Rural de Asturias 2023 (15 de octubre) que este año recayó en la redera María Teresa Costales Obaya (Teté), el consejero de Medio Rural y Política Agraria, Marcelino Marcos, anunció la aprobación en esta legislatura del Estatuto de la Mujer Rural, una nueva norma que se convertirá en una herramienta fundamental para combatir la desigualdad de género, fomentar el empleo y emprendimiento femenino en el campo así como la titularidad compartida de las explotaciones. También favorecerá la representatividad de las mujeres en las asociaciones y organizaciones del campo.
El estatuto pretende terminar con las brechas de género y económicas a las que día a día se enfrentan las mujeres. Dificultades que se acrecientan aún más en las zonas rurales a la hora de conciliar la vida personal y familiar con el trabajo agrícola, ganadero o pesquero. Marcos considera fundamental la aplicación de esta norma para equiparar en derechos a ambos sexos y convertir así la Asturias rural “en un espacio donde se respire igualdad en todos sus ámbitos”.
Nos parece un estatuto fundamental que puede convertirse en una herramienta de cambio y en un instrumento que visibilice la implicación y la aportación de las instituciones públicas actuales en su compromiso con la mujer rural y su entorno. Creemos que la norma puede ayudar a frenar la despoblación.
Asturias está dando pasos interesantes en ese sentido. Es la región europea que más invierte en el programa Leader. Más del 54% de las beneficiadas en 2022 por el tique rural -que va a elevarse este año hasta 50.000 €- son mujeres, pero no es suficiente. Es fundamental la incorporación definitiva de las mujeres a la política local, a todos los ámbitos de la vida pública y en la toma de decisiones. Poner en práctica todo esto mediante acciones de gobierno.