La inauguración en este mes de mayo del último de los tres edificios previstos en el Polígono Industrial de Asipo (Llanera) marca un punto y aparte en la gestión de Sodiasa. Con estas infraestructuras al servicio de los empresarios y los trabajadores, Asipo se refuerza como un polígono de referencia.
La Sociedad para el Desarrollo Industrial de Asipo (Sodiasa) se constituyó en diciembre de 1989. El objetivo era lograr un polígono a la medida de todos los que trabajaban en él. Lucharon para solucionar problemas como el que les impedía construir edificios de cierta altura, o la reunificación de cuatro zonas verdes dispersas en un único terreno a la entrada del polígono. Desde los inicios, el presidente de la junta directiva de Sodiasa ha sido Isidro González, quien previamente tuvo que renunciar a su cargo como secretario general del Polígono de Asipo. Él conoce a la perfección las dificultades superadas, y es el que disfruta en mayor medida de los objetivos logrados.
Uno de los más importantes será culminado estos días: el tercer edificio de servicios, llamado Asipo III, se une a los otros dos existentes. Entre los tres forman un colorido triángulo de edificaciones de dos plantas, más locales comerciales y garajes. El último de ellos está a punto de inaugurarse y nace como complemento perfecto a los anteriores. En color dorado, y con acabados de alta calidad, las oficinas y los locales se están vendiendo a muy buen ritmo, pese a la crisis que rodea a este mercado.
Asipo III tiene unos 7.000 metros cuadrados útiles de edificación, parte de los cuales se han convertido en pequeñas oficinas de sólo 40 metros cuadrados. Se han tabicado de esta manera para dar respuesta a comerciales, representantes y pequeños empresarios que necesitan pocos metros, en relación a la tarea que desarrollan y a los presupuestos que manejan. En parte de las oficinas más grandes, según indica el presidente de Sodiasa, “se instalará la asociación empresarial UITA de vehículos industriales, que estaba ubicada en Noreña y que cuenta con cerca de mil socios. En sus oficinas van a dar cursos de formación a sus asociados, y se van a ocupar de todos los temas de gestión de carnés de conducir, lo cual dará un gran impulso al polígono incluso los fines de semana, que es cuando imparten los cursos”.
Uno de los objetivos más importantes de Sodiasa será culminado estos días: el tercer edificio de Servicios llamado Asipo III.
En la planta baja, a pie de calle, se venderá un único local comercial de gran tamaño. Puesto que el polígono ya cuenta con guardería, entidades bancarias, copistería, quiosco de prensa e incluso con una iglesia, se ha pensado que quizás sería interesante instalar un gimnasio con tienda de equipamiento. Además de ser un lugar muy reclamado por los trabajadores que pasan allí gran parte de su día -a menudo sentados-, está muy cerca de otros centros deportivos como el complejo Fernando Alonso y el Centro Regional de Deportes de La Morgal. Otro de los puntos que viene a reforzar Asipo III es el de los aparcamientos. Como explica Isidro González, “al primer edificio lo dotamos de ciento cuarenta y cinco plazas de garaje. En el segundo pusimos cincuenta y cinco, y todas se vendieron con éxito. Así que en este tercer edificio, dado el éxito de ventas en los dos anteriores, construimos noventa y cuatro. En total, llegamos a un promedio de unas trescientas plazas cubiertas entre los tres edificios y otras cuatrocientas en superficie, con lo cual el parque empresarial está dotado de espacio para aproximadamente setecientos vehículos”.
Hasta el momento las ventas llevan muy buen ritmo, ya que se ha vendido más del 15% de las oficinas. “Quienes se están interesando son los inversores -indica Isidro González-. Ya compraron en los otros edificios y luego vendieron muy bien, por lo tanto están muy animados a volver a comprar en este edificio. Las calidades son extraordinarias y el porvenir de esta zona es el mejor de Asturias. Además es digno de ver, tanto por lo referente a las zonas comerciales como por el entorno, los viales…”
De este modo, los cerca de cuatro mil trabajadores que pasan la semana en el Polígono de Asipo verán más que cubiertas sus necesidades. Paralelamente a la terminación de Asipo III, el papel de Sodiasa ha de tomar un nuevo rumbo o desaparecer, porque ya ha cumplido con todos los objetivos con los que nació. Según explica Isidro González, “la actual junta directiva tiene un mandato por dos años más. En ese tiempo queremos dejar concluida la venta de Asipo I, II y III, así como dejar estructurado qué se va a hacer con Sodiasa en estos dos años. La verdad es que fue creada única y exclusivamente para hacer esto, y está terminado, pero nos da pena que desaparezca porque es una buena empresa y ha conseguido un prestigio dentro de la construcción y los polígonos industriales. De todos modos, ni yo ni la actual junta directiva vamos a seguir en este proyecto. Yo prometí que me retiraba dejando todo realizado, que era mi último mandato, y así voy a cumplirlo. Eso no quiere decir que no sigan otros, cosa que nos gustaría porque en Asipo queda mucho por hacer: una ampliación del polígono, reconvertir terrenos que nos rodean en zonas deportivas… Con imaginación Sodiasa podría tener un futuro de continuación, en lugar de un presente de liquidación”. El listón que ha dejado la actual junta directiva está muy alto.