Nada mejor que escuchar a los propios empresarios de Roces Porceyo para tomar el pulso a un polígono que destaca por su diversificación sectorial. / Fotos: Fusión Asturias
Reparación del automóvil
Gabi, com o se conoce al empresario de Talleres Primarso en Roces Porceyo, asegura que acertó al cien por cien con la elección del polígono. Hace diez años tenía una nave y hace tres abrió la segunda, trasladando a ella toda su clientela. Todo fue motivado por una necesidad de espacio y de mejora de servicios de cara a sus clientes. «Yo creo que la mayor ventaja que tenemos aquí es la ubicación -comenta-. Estamos muy próximos a Gijón y muy bien comunicados, y una vez que sales accedes muy fácilmente a la comunicación con Oviedo y Santander, incluso para ir a la ITV. Tienes todo a mano».
Para este empresario del sector del automóvil, la evolución y futuro de la empresa pasa por la inversión en la línea de los coches híbridos o eléctricos. Aunque actualmente los consumidores están siendo el banco de pruebas del sector, es importante formarse de cara a ese futuro próximo. «Hemos invertido en el tema de mecánica, máquinas de diagnosis, cursos de formación… En cuanto al tema de carrocería se trabaja más o menos igual pero en referencia al otro tema tienes que actualizarte porque todos los días surge algo y tienes que saber dar respuesta a los clientes».
Otro de los servicios que este negocio familiar ofrece a sus clientes es la restauración de coches antiguos. Para Gabi el vehículo clásico es mejor que un cuadro colgado en casa ya que no solo lo disfruta la familia sino que también se revaloriza.
Roberto Fernández Nieto
Distribución de llantas y neumáticos
Llantastur, la empresa de Roberto lleva aproximadamente cuatro años en Porceyo y actualmente son ocho los trabajadores que dan vida a este taller que se ha especializado en la venta y reparación de todo tipo de llantas de aleación para turismo, competición, 4×4, SUV y transporte ligero. Lo primero que llama la atención nada más entrar es la gran exposición de llantas que tienen en sus instalaciones. «No es habitual tener una exposición tan grande como esta -comenta Roberto, gerente del taller-. De hecho muchos de los comerciales que vienen y que trabajan en una zona más amplia, no conocen a nadie que tenga tanta variedad. Nosotros no hacemos mecánica, ni electricidad ni nada que no tenga que ver con lo que es la rueda. Nos hemos especializado en esto y en neumáticos ya que somos distribuidores oficiales de YOKOHAMA y contamos con un gran stock de otras marcas».
Estar tan focalizados en este sector y también tener una web en la que se pueden consultar stock y precios, hace que muchos de los clientes de Llantastur vengan de provincias y comunidades limítrofes como León, Galicia o Santander. A esto hay que sumarle que el horario de esta empresa es ininterrumpido.
Roberto se encuentra muy a gusto en el polígono y la única pega que pone es la falta de algún servicio de hostelería en su zona. «Donde nosotros estamos ubicados no hay ningún local en el que un cliente pueda tomarse un café y esperar, con lo cual intentamos ajustar mucho los horarios que damos para no entretenerlos y que no pierdan tiempo».
Artes gráficas y serigrafía
Hace dieciocho años que José Ramón, gerente de Coseno, apostó por instalarse en el polígono de Roces y conoce a la perfección cómo fue la evolución de esta área gijonesa. «Ahora mismo tenemos una organización que está funcionando muy bien. Fueron muchos los servicios que se consiguieron porque el polígono estaba sin nada y hubo que hacerlo todo: calles, alcantarillado, hidrantes, limpieza… Yo dejé la junta de Gespor hace tres años y me gustaría que mucha más gente colaborase porque así esto podría ser completamente diferente».
El sector al que pertenece la empresa de José Ramón (maquinaria y tintas para serigrafía, tampografía y digital) les obliga a estar en continuo cambio ya que las nuevas tecnologías, tanto en el tema de impresión láser como en el de serigrafía, avanzan a pasos agigantados. «Hay que estar siempre cambiando y organizándonos para estar a la última. Siempre destinamos una parte a I+D+I para poder incorporar los servicios que demandan nuestros clientes».
Actualmente en la empresa son cinco trabajadores y siguen comprometidos con Gespor ya que no tendría sentido dejar de colaborar después de haber participado activamente en una intensa campaña de captación de socios para la asociación de empresarios.
Restauración
Este empresario supo desde el primer momento apostar por unos de los sectores más importantes de un polígono: la restauración y el hospedaje. En el año 2006 inauguró el restaurante Uría que se convirtió en el principal del polígono. «Adquirimos el complejo a través de una subasta que se hizo desde el Ayuntamiento dos años antes de hacer la ejecución de la obra. Adquirir la parcela así nos permitía poder dedicarla a varias cosas y una de ellas era el tema hotelero. Con lo cual comenzamos con el restaurante y hace dos años inauguramos también un hotel». En este caso la clave del éxito fue saber detectar las necesidades que había en el polígono y que no estaban cubiertas. Muchos de los comerciales que visitaban empresas o personas que acudían al área a realizar trabajos durante largos periodos de tiempo, no encontraban un lugar económico y cercano para poder pernoctar. «Es un hotel de una estrella, con unos precios apropiados y asequibles para cualquier trabajador. Hemos visto hoteles de cuatro estrellas en la zona que no han llegado a triunfar tanto por la ubicación como por los precios. Nosotros hemos sabido dar con la fórmula y estamos muy contentos».
Para este empresario emprendedor una de las ventajas fundamentales de Roces Porceyo es su cercanía a Gijón y su diversificación en cuanto a los sectores industriales que aglutina. Esta proximidad permite utilizar el coche como transporte fundamental ya que tampoco existen grandes problemas de aparcamiento en el polígono. El único problema que cree que se debería mejorar es el servicio de autobuses durante el fin de semana, «creo que limita los horarios de trabajadores e incluso de empresas que podrían llegar a trabajar más los fines de semana».