Los datos en materia de igualdad de género indican que aún queda mucho por hacer en este terreno. El 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, se conmemora la lucha de la mujer por su participación en todos los ámbitos de la sociedad, en plano de igualdad con el hombre. Para visibilizar el papel de la mujer, se preparan en la Comunidad distintas actividades relacionadas con este tema, bien desde el ámbito público -Principado y ayuntamientos- o privado. Son necesarios más cambios.
Acabamos de conocer, a través del primer estudio sobre la brecha salarial en Asturias elaborado por la Universidad de Oviedo, que Asturias es una de las comunidades autónomas donde las diferencias de sueldo entre hombres y mujeres son mayores. Las asturianas cobran un 28,7% menos que ellos. Una de las razones es que tienden a ocupar los puestos de trabajo más bajos -aunque por su capital humano podrían acceder a otros de más categoría-, y por tanto reciben menos dinero por ello. «Además del techo de cristal, señala el estudio, las mujeres deben enfrentarse a un ‘suelo pegajoso’ que dificulta que puedan acceder a los primeros niveles de su categoría. Conciliar la vida profesional y laboral sigue siendo una de las mayores dificultades para progresar dentro de la carrera profesional de una mujer». Bajo salario quiere decir también que para obtener la misma pensión, una trabajadora debe cotizar once años y medio más que un hombre. Un dato más que confirma que las políticas de igualdad que se están aplicando son del todo insuficientes.
En este Día Internacional de la Mujer las asturianas reivindican desde diferentes foros unas políticas de estímulo y un empleo de calidad, y defienden las conquistas conseguidas en todos estos años. La salida a esta crisis no será posible si no pasa por el respeto a la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres, de manera integral y en todos los órdenes de la vida.