12.6 C
Oviedo
lunes 2, diciembre 2024

“Ser o no Ser”

Lo más leído

“Ser o no ser”. Esa es la cuestión. Pero ¿cuál es el alcance de esta histórica frase dicha por Hamlet, príncipe protagonista de la famosa obra de William Shakespeare?
“Ser o no ser” abarca todo el abanico, todo el espacio dimensional que comprende el desarrollo evolutivo del ser humano. Es como sintetizar en una frase todo lo que el hombre debe de tener en cuenta para evolucionar.

“Ser” implica manifestarse, vivir, expresarse desde la consciencia de quien eres, de cómo eres, en tu realidad interna, en tu origen, en tu existencia, más allá de la forma física, de la conducta emocional y de la “maquinaria” mental, que estás permanentemente usando pero que se alimenta del exterior no del interior.

“No ser”, por el contrario, es vivir dentro de un círculo formado por las energías antes citadas, física, emocional y mental y que convierten a las personas en zombis de sus propios anhelos, deseos, ilusiones, sin darse cuenta de que nunca van a salir de esa trampa en la que están prisioneros porque siempre la están alimentando desde la inconsciencia, desde la ilusión que les tiene cautivos y hace que se sientan a gusto, “felices” por formar parte de esa irrealidad. Es como si la mosca se encontrara feliz en la tela de araña.

“Ser”, palabra que expresa y manifiesta la presencia en los planos inferiores de la naturaleza superior.

Por supuesto, “Ser o no Ser” no son dos niveles de existencia aislados, sino que entre ambos “extremos” existen innumerables planos que sirven para ubicar y ordenar a las vidas que están en el camino evolutivo hacia el “Ser” o, por el contrario, a aquellos que se van degradando progresivamente hasta “instalarse” en el “No Ser”, hasta perder toda referencia de su naturaleza superior y caminar hacia su autodestrucción.

“Ser”, palabra que expresa y manifiesta la presencia en los planos inferiores de la naturaleza superior, que está presente en todos los niveles de existencia, mostrando el camino a recorrer para poder comprender el significado de dicha expresión y “marcando” una ruta a seguir para todo aquel que se encuentre perdido o confundido.

Por ejemplo, un joven quiere ser médico porque su sueño es curar personas, ayudar a otros a luchar contra la enfermedad. Pero, con el tiempo, ese médico, ya activo, puede cansarse o desviarse de su sueño, de su objetivo original. Entonces es cuando debe acudir a su interior, al lugar donde el “Ser” sigue vivo, donde la fuerza de su sueño permanece intacta y, desde ahí, enfrentarse a todos los problemas que hay que superar para que la energía pura siga manifestándose y el médico renazca de nuevo con fuerza.
Permanecer en el “Ser” no solo es su obligación, su responsabilidad, sino que es lo que le define, lo que le señala, porque para sus pacientes no es fulanito o fulanita sino su médico.
Si por alguna razón se deja llevar por el cansancio, o peor aún, por la compensación material en forma de ganancias, sueldo, buscando su crecimiento económico y la posición social que le aporta, entonces eligió el camino hacia el “No Ser”, porque negó su motivación original, porque se habrá convertido en un médico selecto para personas selectas, algo que existe en nuestra sociedad, por desgracia.
Este ejemplo podemos llevarlo a cualquier profesión que se inicia con una actitud altruista y, con el tiempo, se convierte en una actitud egoísta. También a cualquier persona que esté buscando su lugar en la vida, su camino, más allá de su trabajo o su ocio.

Vivir es, al fin y al cabo, un definirse, una elección de camino a seguir en la búsqueda del sentido profundo de la existencia.

Si con la compresión de este ejemplo miramos a nuestro alrededor, y también a nosotros mismos, veremos que vivir es, al fin y al cabo, un definirse, una elección de camino a seguir en la búsqueda del sentido profundo de la existencia.

¿Para qué estamos aquí?, se preguntan muchas personas. Pues, sencillamente, para estudiar y comprender el sentido real de la existencia, y para examinarse y pasar la selección en el camino hacia el nivel del “Ser” y poder atisbar el futuro hacia el que caminamos, el futuro anunciado por todas las religiones, aunque cada una lo hace desde su propia visión y comprensión, porque en ese nivel en el que se manifiesta el “Ser” los seres humanos no son “vistos” según su color o ideología, sino como hijos del Sueño Uno.

Como nos anunció Jesús… “todos sois hijos del mismo Padre”. Así que “Ser” o “No Ser” es, en síntesis, caminar por la senda que nos conduce al “Ser”, que también se puede definir como “Yo Soy” o, por el contrario, caminar por la senda del “No Ser”, que conduce a la negación y a la consecuente autodestrucción.

En estos tiempos es muy fácil distinguir quien es fiel a su sueño, a su responsabilidad, a su compromiso con la sociedad y quien utiliza su nivel social para lucrarse y estar por encima de los demás.

“Ser o no ser, esa es la cuestión”, fue muy bien captado por Shakespeare y plasmado por su personaje Hamlet, pero, en realidad, detrás de dicha obra, existe un mensaje atemporal, mensaje que hoy se puede comprender fácilmente a través de ejemplos vivos y reales de nuestra sociedad, porque en estos tiempos es muy fácil distinguir quien es fiel a su sueño, a su responsabilidad, a su compromiso con la sociedad y quien utiliza su nivel social para lucrarse y estar por encima de los demás.

Es muy importante comprender y diferenciar el significado del “Ser o no Ser”, porque es la base sobre la que se levantará el futuro y también la Nueva Humanidad, porque esta se está forjando sobre los restos, sobre los despojos de la humanidad actual, porque cuando más destaca la luz es cuando más intensa es la oscuridad.

“Ser o no Ser”, en el próximo futuro se sintetizará en “Ser”, porque una humanidad unida, una humanidad que cambie el “yo” por el “nosotros” es la base del Sueño del Creador, de Aquel que nos creó a Su imagen y semejanza.
Así es y así será.

¿De cuánta utilidad te ha parecido este contenido?

¡Haz clic en una estrella para puntuarlo!

Promedio de puntuación 4.9 / 5. Recuento de votos: 11

Hasta ahora, ¡no hay votos!. Sé el primero en puntuar este contenido.

Más del autor /a

Mujer y Mente

Razón y razonamiento

La renuncia

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí


- Publicidad -

Últimos artículos

- Publicidad -