El pasado 23 de marzo en los salones de la Sociedad La Montera (Sama de Langreo) tuvo lugar un sencillo homenaje en recuerdo al poeta langreano Valentín Ochoa, “Antón el Chiova”, con motivo del 145 aniversario de su nacimiento. El acto estuvo organizado por La Tertulia Encuentros y el Sindicato de Autor@s de Langreo.
Y no se le recordó de mejor forma que repasando su vida, su legado y leyendo las poesías de este hombre sencillo y amable que tanto quería a Langreo y sus gentes. El acto estuvo presentado por el profesor y escritor Lluis Aique Iglesias y contó con la presencia de la concejala de Cultura del Ayuntamiento de Langreo, Angelita Cuevas. El escritor Miguel Ángel Fernández fue el encargado de repasar la biografía del poeta y Xulio Arbesú cerró el acto con dos canciones de su repertorio, “La Lloca” con la colaboración de Solinca Turbón y “Posaben cinco muyeres” sobre la vida de las carboneras.
En 1964 el Ayuntamiento le pone su nombre a una calle de la villa; en 1975, con motivo del Día del Libro, se le hace un homenaje y se presenta su antología Versos. En 1994 el Principado le dedica la Semana de les Lletres Asturianes.
Este poeta popular nacido en 1879, símbolo lírico de las fiestas del pueblo, escribió bellos versos que fueron pilares en el mantenimiento del asturiano, con los que supo ganarse el cariño de sus vecinos.
Las escasas enciclopedias que hablan de él dicen que nació en el barrio de Los Nozalones de Sama, acudió a la escuela y en paralelo ayudaba en la fragua familiar. Eso no me le impidió desplazarse cada tarde a Mieres (unos 15 km) para asistir a clases nocturnas de la Escuela de Capataces. Era muy buen estudiante, pronto sacó el título y años después compaginaba su trabajo con la docencia.
Su pasión por la poesía le lleva a publicar versos en castellano y asturiano, así como diversas columnas de opinión, pero la producción es tan amplia que en 1906 funda El Porvenir de Langreo; luego en 1910, El Concejal, donde además de literatura da un paso más hacia la política definiéndose abiertamente como republicano. En 1918 funda El Nalón, un semanario republicano, donde tienen cabida sus poemas de denuncia social. La muerte de su esposa y la desilusión por el fracaso de la II República, marcan profundamente su producción poética que se incrementa aún más a partir de ese momento.
Falleció en Gijón a donde se traslada cuando se jubila en 1948. Curiosamente el mismo día de su muerte, le conceden la Medalla al Mérito del Trabajo en reconocimiento a su entrega siempre generosa al concejo de Langreo que recibe a título póstumo.
La producción poética de Antón el Chiova de carácter festivo -llena de humor-, amorosa -la de más calidad-, la autobiográfica -infancia, vida profesional y afectiva- y la de carácter social -emigración, republicanismo, crítica anticlerical-, se encuentra lamentablemente diseminada por periódicos, programas de fiestas y manuscritos. Tan solo dos antologías publicadas hasta la fecha recopilan una parte de la obra de este prolífico poeta: una a cargo del propio Ayuntamiento de Langreo en 1974, en base a una selección realizada por el también escritor langreano José León Delestal y otra reunida por Pablo Antón Marín Estrada con el soporte institucional del Principado de Asturias que ve la luz en 1994.
Los que mantienen viva su memoria aseguran que su espíritu sigue vivo en el concejo que le vio nacer.