En el frío enero ¿cómo decir que no a un pote de nabos? Acabamos de salir de los excesos navideños, y no hay nada como la comida tradicional para asentar el cuerpo y llenarlo de fuerzas para el nuevo año que acaba de empezar.
En el concejo de Morcín saben mucho de esto, y por eso en La Foz han preparado un enero gastronómico lleno de propuestas de la vieja escuela: queso Afuega’l Pitu, nabos, casadielles caseras…
No sólo de paisaje vive el hombre. Si así fuese, en Morcín estarían servidos, gracias al espectacular entorno de montaña, a los pies de la Madalena o Monsacro, que lleva siglos aportando leyendas al imaginario de la zona; al lado, el Paisaje Protegido de la Sierra del Aramo, con la subida al puerto de L’Angliru, aporta la mítica moderna y llena los accesos de ciclistas y caminantes. Y más: la Ruta de las Xanas, la de la mina Esperanza, la del pico Llosoriu… a las más transitadas se une ya una senda fluvial en el cauce del río Riosa, que une el concejo vecino con Morcín. El camino no está totalmente finalizado, pero las obras van a buen ritmo y permiten a los vecinos pasear con seguridad. Era ésta una infraestructura muy demandada, que cumple una doble funcionalidad: al acondicionamiento del camino se une el saneamiento del río, que incluye la instalación de una imprescindible depuradora.
El concejo de Morcín está dividido en siete parroquias, con ambientes que oscilan entre la placidez del rural asturiano y la modernidad de Santolaya, capital administrativa y pequeño núcleo de servicios. La cercanía a Oviedo ha propiciado un pequeño despunte de la vertiente habitacional, que se ve claramente en los más recientes edificios de viviendas, pero también en las muchas casas restauradas de quienes han decidido convertir Morcín en su primera o segunda residencia.
Si Santolaya es la cabeza del concejo, es muy posible que La Foz de Morcín sea el corazón. Para llegar hasta aquí hay que desviarse de la carretera nacional y adentrarse en la montaña por la AS-231. Esta distancia, que geográficamente es mínima, psicológicamente hace que los focetanos tiendan a ser autosuficientes. El asociacionismo en La Foz es altísimo, muestra de un carácter que tiene algo de emprendedor y un mucho de orgullo por la tierra propia. Así, lo mismo consiguen el premio al Pueblo Ejemplar de Asturias (en 2002) que recuperan un producto casi olvidado (los nabos) o consiguen que un queso tradicional de la zona llegue a la alta cocina (el Afuega’l Pitu, hoy con Denominación de Origen Protegida)
¿Hay fame?
Tiene que haberla para acudir al XI Gran Capítulo de la Cofradía de Amigos de los Nabos, asociación gastronómica que promueve el uso de este tubérculo en la cocina. Tras más de una década empeñados en el asunto, lo que parecía imposible hoy es ya una realidad: el pote de nabos es un plato habitual en las casas asturianas y en los restaurantes de la zona, especialmente en estos días. El evento será el fin de semana del 9 y 10 de enero, e incluye la recepción a la cofradía portuguesa de Nabos e Companhía, lo que demuestra que el nabo es un producto internacional. A la ceremonia solemne y las imprescindibles degustaciones (con un gran almuerzo de confraternización el sábado) se une la inauguración del monolito «Besa el nabo» en la Plaza del Cura, que queda ya como homenaje al trabajo y la dedicación de esta cofradía.
También se celebra en Moreda la final del II Concurso «Los nabos na cocina» para escuelas de hostelerías, que el año pasado tuvo un gran éxito y demostró la versatilidad de este tubérculo para dar sustancia a platos de alta cocina. Basta ver los nombres de los ganadores de 2013: «Balsa de nabo acaramelado», «Nabo relleno de espuma de compango de fabada, con longaniza de Avilés y una tierra del Rey Silo» y «Crema de nabos con verduritas maceradas».
Viva San Antón
El 17 de enero se celebra la fiesta del patrón de La Foz de Morcín, San Antón Abad. A los actos tradicionales como la procesión, misa solemne y la «puya’l ramu» se unen otros más modernos como el Concurso Mundial de Casadielles, que va ya por la VI edición. La Hermandad de La Probe, una de las asociaciones más activas del concejo, se ocupa de organizar estos actos y los del día siguiente, con el XXXV Certamen del Queso d’Afuega’l Pitu, acto multitudinario que abarrota las calles de esta localidad, normalmente tranquila.
Por la mañana tiene lugar el III Trail de Montaña Afuega’l Pitu, una subida al Monsacro que atrae cada vez a más gente, tanto por el interés de su trazado como por la fiesta posterior. El programa del día incluye el Certamen en el que participan elaboradores incluidos dentro de la Denominación de Origen Protegida, y muchas más actividades: mercado de productos agroalimentarios, exposición de artesanía, demostración en directo de la elaboración del queso, exhibición de deportes tradicionales, entrega de los galardones al Quesero Mayor de Asturias y al Afuega’l Pitu de Oro, el Nabu de Plata y los premios del Certamen y del Concurso «Los Nabos na cocina» del fin de semana anterior. Aprovechando el tirón, los restaurantes del concejo preparan menús especiales que incluyen el pote de nabos, las casadielles y, por supuesto, Afuega’l Pitu. Qué mejor ocasión para probarlo todo junto.
Son muchas cosas y pocos días, mejor tomar nota para no perderse nada.
9 y 10 de enero
• XI Gran Capítulo de la Cofradía de Amigos de los Nabos.
17 de enero
• Fiesta de San Antón Abad.
18 de enero
• III Trail de Montaña Afuega’l Pitu.
• XXXV Certamen del Queso Afuega’l Pitu.