Hay que reconocer que el cuarto concejo en población de Asturias es también famoso por sus fiestas y romerías. Son muchas y muy sonadas, lo cual permite conocer el concejo de una forma muy entretenida.
En el centro de la fiesta
Si quisiéramos programar una ruta por el concejo sierense podríamos comenzar en Pola de Siero, la capital del municipio. Hay fechas imprescindibles para todos los polesos. Una de ellas es el jueves 19 de febrero, el día de Comadres y es también la que inaugura el calendario festivo local. En esa jornada la tradición manda degustar en la merienda-cena los bollos de manteca y chorizo que se pueden adquirir en las panaderías. Las pandillas de amigos se reúnen en bares y sidrerías y dan buena cuenta de los bollos; la fiesta se prolonga hasta bien tarde. El día de Comadres es el preludio del Antroxu, que se celebra los días 23 y 24 de febrero en todo el concejo. El seguimiento de esta fiesta es cada año mayor.
Pero para conocer el espíritu de La Pola hay que participar en la Fiesta de los Huevos Pintos, declarada de Interés Turístico Nacional. Tiene lugar el martes siguiente al domingo de Pascua, y consiste en la exposición, venta y regalos de huevos pintados artesanalmente, una costumbre que también podemos ver en países como Rusia, China, Grecia, Inglaterra…
Si la visita al concejo de Siero tiene lugar en verano habrá que escoger la fecha adecuada y ésta podría ser a mediados del mes de julio. Así, de paso que conocemos el municipio podremos disfrutar de otra de las grandes fiestas de Pola de Siero: el Carmín. No requiere muchas presentaciones, pues esta romería (el lunes siguiente a Ntra. Sra. del Carmen, el 16 de julio) es conocida dentro y fuera de Asturias.
La visita no será completa sin conocer antes algunas de las localidades más destacadas de Siero. El Berrón es la tercera población en número de habitantes y uno de los núcleos que está experimentando un importante proceso de desarrollo urbanístico y empresarial. La vida en este enclave discurre de forma tranquila y sus habitantes disfrutan de buenos servicios, un polideportivo, una biblioteca municipal y Casa de Cultura, aunque el aumento de población ya hace necesario que se incrementen las dotaciones, por eso pronto disfrutará de un nuevo Centro Social polivalente.
Lugones es otra localidad puntera en el concejo. Ha crecido tanto que con más de 11.000 habitantes supera en población a la capital del concejo. La proximidad a Oviedo ha facilitado que Lugones haya dejado atrás su carácter rural para dar lugar a una ciudad residencial y de servicios que además está incrementando su oferta comercial.
En Colloto, una localidad perteneciente a los municipios de Siero y Oviedo hay que ver el puente medieval de doble arco y la Iglesia de Santa Eulalia, que presenta vestigios romanos.
La Fresneda, que apenas cuenta con veinte años de vida, nació como una urbanización y es ya una localidad de 4000 habitantes que sigue creciendo.
Antes de abandonar las tierras de Siero hay que comprobar por uno mismo si es verdad lo que de ellas dicen: que su gastronomía es estupenda, basada en los productos de la región. De la sidra no hay duda, en el municipio hay numerosos lagares de gran tradición y experiencia. Los embutidos y los platos con derivados de carne de vacuno o porcino son también muy reconocidos, así que hay que probar los callos, la lengua embuchada, el lacón cocido, la carne gobernada, entre otros muchos productos. Y para fabes, las de la parroquia de Argüelles, que cuentan con denominación de origen. (…)
Fotos: Juanjo Arrojo