La información en salud es un campo realmente sensible y en los últimos años las “fake news” en salud se han convertido en algo muy habitual a lo que es muy complicado darle la vuelta.
La plataforma Salud Sin Bulos publicaba en mayo de 2025 un estudio que recogía afirmaciones realmente preocupantes. “Instagram y YouTube son las plataformas más utilizadas para difundir desinformación relacionada con la nutrición, según una revisión sistemática de investigadores españoles publicada en Nutrición Hospitalaria en abril de 2025. Eso incluye dietas milagrosas sin respaldo científico, recomendaciones alimentarias no verificadas y vínculos falsos entre ciertos alimentos y la prevención o cura de enfermedades. La mayoría de estos contenidos carecen de evidencia científica y pueden poner en riesgo la salud pública”.
El mundo de la alimentación, las “dietas milagro”, los “superalimentos”, son protagonistas muy frecuentemente de todo tipo de contenido en redes sociales e internet, y la dieta sin gluten no escapa a esta tendencia. Más bien al revés, son numerosos los bulos y mitos que hay relacionados con este tipo de alimentación, que, en realidad, es el tratamiento que deben seguir las personas diagnosticadas de Enfermedad Celiaca y Sensibilidad al gluten/trigo no celiaca para recuperar su salud.
A la dieta sin gluten se le atribuyen propiedades tan atractivas para la población hoy en día como: “antiinflamatoria y adelgazante”. Sin embargo, que un tipo de alimentación adelgace, por ejemplo, no tiene que ver con el gluten, tiene que ver con el tipo de alimentación que hacemos (las magdalenas sin gluten también son ultraprocesados muy calóricos, por ejemplo).
La Enfermedad Celiaca o Celiaquía, tampoco se libra de ser protagonista en cuentas de TikTok, Instagram, podcast… en muchas ocasiones para bien, pero no siempre. Estas son algunas de las afirmaciones sobre Enfermedad Celiaca más populares entre la población en general (a veces también entre las personas diagnosticadas e incluso algunos profesionales sanitarios) y que no son ciertas:
Enfermedad Autoinmune vs intolerancia
Durante muchos años se definía la Enfermedad Celiaca como una intolerancia permanente al gluten. Desde hace ya años las guías no recogen el término intolerancia para hacer referencia a la Celiaquía. Se trata de una enfermedad de base inmunológica provocada por el consumo de gluten en individuos predispuestos genéticamente. Es además una enfermedad crónica y sistémica, es decir, no tiene cura a día de hoy (sí tratamiento) y puede provocar manifestaciones tanto digestivas como extradigestivas.
Así lo recoge el actual Protocolo de Diagnóstico Precoz de la Enfermedad Celiaca, publicado por el Ministerio de Sanidad de España en 2018.
La base de la enfermedad está en el sistema inmunológico, por lo que hablamos de un trastorno autoinmune que además puede asociarse con otras enfermedades también autoinmunes, sobre todo con Diabetes tipo I y el Hipotiroidismo de Hashimoto, que se consideran grupos de riesgo de Celiaquía y viceversa.
la Celiaquía se trata de una enfermedad de base inmunológica provocada por el consumo de gluten en individuos predispuestos genéticamente. Es además una enfermedad crónica y sistémica.
Cuando una persona con celiaquía consume gluten, su sistema inmunológico pone en marcha un complejo mecanismo para defenderse de lo que considera una sustancia dañina, el gluten, en este caso por error. Esto acaba produciendo daño a nivel de las vellosidades intestinales que pueden llegar a atrofiarse completamente y derivar esto en problemas de malabsorción, además de todo tipo de síntomas digestivos y/o extradigestivos.
El término “intolerancia al gluten” no es un término correcto y está en desuso porque puede llevar a error, aunque se siga utilizando a día de hoy incluso en consulta.
Enfermedad digestiva
Ya en el anterior punto queda claro. La Celiaquía produce síntomas difusos, inespecíficos y muy variados, lo que puede complicar el inicio de la batería de pruebas necesarias para su diagnóstico.
Sí es importante saber que los síntomas varían con la etapa de la vida en la que se encuentra el paciente y que pueden ser digestivos y/o extradigestivos. Al tratarse de una enfermedad sistémica podemos encontrar manifestaciones neurológicas, dermatológicas, ginecológicas, hepáticas, digestivas, etc.
Los grandes expertos de la Sociedad Española de Enfermedad Celiaca (SEEC) hacen hincapié siempre en la necesidad de elevar la sospecha clínica ante determinadas manifestaciones y signos de laboratorio compatibles con celiaquía, aunque no sean los más frecuentes.
Dieta sin gluten estricta
El único tratamiento eficaz a día de hoy para la Enfermedad Celiaca es una estricta dieta sin gluten. Esta dieta debe estar basada en alimentos que de manera natural no contienen gluten y no debe transgredirse voluntariamente nunca.
Cada vez que una persona con Celiaquía consume gluten, produce esa respuesta inmunológica que es lo que conviene evitar para que no haya consecuencias más severas en un medio/largo plazo. Esa respuesta inmunológica va acompañada de daño intestinal, pero no siempre de síntomas externos.
Enfermedad infantil
Aunque es cierto que muchas personas con Celiaquía debutan en la infancia, en la actualidad sabemos que es una enfermedad que puede aparecer en cualquier momento de la vida siempre y cuando haya predisposición genética. De hecho, hoy en día el 20% de los diagnósticos se están dando en personas de más de 60 años.
Grados de Celiaquía
Es una de las preguntas que más a menudo nos hacen a las personas con celiaquía. ¿Eres muy celiaco o poco celiaco?
Es un error frecuente que viene de la mano de una enfermedad compleja, porque la celiaquía no produce la misma sintomatología en todas las personas. De hecho, puede haber personas diagnosticadas que casi no tienen síntomas cuando se contaminan con gluten, y otras que tienen síntomas severos. Y esto no implica que sean menos celiacos o que tengan un grado menor o mayor de celiaquía: significa que sus síntomas son más leves, pero el daño intestinal y la respuesta inmunológica se produce siempre.
Por eso la dieta debe ser igual de estricta para todos los pacientes diagnosticados de celiaquía, independientemente de los síntomas que tengan si consumen gluten e independientemente de la lesión intestinal (más o menos severa) que tengan en el momento del diagnóstico.
Las transgresiones frecuentes en la dieta sin gluten pueden producir complicaciones realmente serias en un medio/largo plazo. La dieta debe ser estricta siempre, evitando transgresiones voluntarias y tratando de reducir el riesgo de contacto cruzado por gluten (pequeñas trazas por manipulación de alimentos) tanto en casa como fuera de ella.
Curación
También es frecuente oír hablar de personas que se han curado de Celiaquía. Este es un tema realmente sensible porque puede influir en el comportamiento de pacientes diagnosticados correctamente que deben llevar una estricta dieta.
A día de hoy, por desgracia, la celiaquía no tiene cura, pero sí tiene un tratamiento que nos permite a los pacientes llevar una vida completamente normal y recuperar nuestra salud. Aunque eso sí, nuestra dieta no sólo debe excluir el gluten, debe estar basada en alimentos reales libres de gluten de forma natural y debe ser variada, equilibrada y completa.
Si conoces a alguien que se haya curado, hay dos opciones: no se ha curado y debe volver a hacer dieta sin gluten estricta lo antes posible, o, recibió un diagnóstico erróneo y en realidad nunca ha tenido celiaquía.
Para mí todo es de gran utilidad.
Gracias por toda la información y los estudios que realizas.