No todo es lo que parece. Entramos en el mundo de lo muy pequeño, penetramos en un espacio donde los materiales pueden cambiar sus propiedades e incluso es posible crear otros materiales nuevos que no existen en la naturaleza. Parece magia pero es algo real. Hablar de nanotecnología supone un cambio en la manera de pensar y en la forma científica de ver el mundo. La que sedujo al científico y divulgador asturiano Amador Menéndez.
La influencia de los deslizamientos en Asturias, donde se les conoce como argayos, determina el paisaje, pero también la seguridad de los ciudadanos. Los argayos más desconocidos son los que se producen en la costa, por ello de aquí a 2020 el proyecto COSINES busca determinar su origen para poder alertar sobre ellos.
Si hubiese que definir en una palabra el trabajo de Pedro Gorría seria investigador. Si fuesen dos, añadiríamos divulgador. Los nuevos materiales nos rodean, hay que fijar la vista y descubrir su comportamiento, para luego en un sentido más práctico, ver dónde se pueden utilizar para mejorar el mundo que tenemos. Esta es la pasión que intenta contagiar.
Estudia geología en la Universidad de Oviedo y durante veinticinco años trabaja en los pozos de Hunosa, extrayendo información de las entrañas de la tierra. Una vez jubilado sigue con su gran pasión, que le lleva a recorrer las cuevas del litoral asturiano.
Cielos despejados, altas temperaturas, algo de nubosidad pero pocas lluvias. El buen tiempo nos acompaña. Una situación valorada muy positivamente por el ciudadano y por el sector turístico, que de seguir así puede costarnos cara a corto y medio plazo.
En Europa se considera 'rara' a una enfermedad que afecta a una de cada dos mil personas, y la OMS indica que hay entre seis mil y ocho mil patologías de este tipo, que están afectando hasta el 6% de la población. En España serían tres millones de personas, y en Asturias hay cerca de setecientos afectados y dos o tres mil portadores.
Quiere sacar la cardiología de los hospitales, trabajando en prevención para no tener que llegar a intervenir, y educando para evitar que las enfermedades 'esclavicen' al paciente. De ahí que, tras trabajar en Londres y Barcelona decidiese volver a su Asturias natal para crear el Instituto Corvilud: corazón, vida y salud. Ahora ejerce como cardióloga en el Hospital de Jove, pero siempre sin perder lo que ella llama su 'espíritu Corvilud': estar accesible más allá de la estructura rígida de una consulta, promover esos hábitos saludables allá donde va. Más que curar, enseña a no enfermar.
Inspirada por el carácter pujante de la energía de biomasa, la ingeniera asturiana Sandra Sánchez García estudia la potencialidad del uso de biomasa en Asturias con una perspectiva orientada a planificar de forma integral el aprovechamiento de esta energía limpia, lo que la ha llevado a centros de investigación suecos en tres ocasiones.
¿Cómo sería el mundo si no se hubiese descubierto la corriente alterna? La civilización que conocemos debe mucho a Nikola Tesla y a todos sus inventos, desde la radio a las lámparas de bajo consumo o la transmisión inalámbrica de electricidad, entre otros muchos.
El mar también se siembra y se cosecha. No de hortalizas ni de flores ornamentales, sino de erizos o almejas. De esto saben mucho en el Centro de Experimentación Pesquera de Castropol, donde llevan varios años criando equinodermos y moluscos para repoblar el litoral asturiano. Al frente del Centro se encuentra la bióloga Carmen Rodríguez.