La cría de foca gris recogida en febrero en una playa de Llanes ya ha sido puesta en libertad en el entorno de Cabo Peñas. Mientras, el osezno rescatado en Yernes y Tameza, el pasado mes de abril, continúa su recuperación para poder ser reintroducido.
A ambos mamíferos les esperaba la vida en libertad, aunque ha sido la foca gris la primera en experimentarlo, tras ser reintroducida en la primera semana de mayo a diez millas de la costa asturiana. El ejemplar, rescatado en la playa de San Antolín, en Llanes, permaneció en el Centro de Recuperación de la Fauna Silvestre hasta alcanzar las condiciones óptimas para su liberación. Durante este periodo, el animal recuperó peso hasta alcanzar los 30 kilos, momento en el cual ya se devolvió al mar. No es la primera foca que en este año se reintroduce en el mar, ya que anteriormente fueron liberados otros dos ejemplares en el mes de marzo.
Desde la Consejería de Medio Ambiente recomiendan a los ciudadanos que en el caso de avistar un animal marino varado avisen prontamente a los servicios de emergencia, al tiempo que advierten que por el bien del animal no deben acercarse a él, tampoco tocarlo o darle alimentos.
Las imágenes facilitadas muestran a un esbardo que goza de buena salud y con una clara disposición al juego y al descubrimiento del entorno.
Por otra parte, el esbardo localizado por el grupo de montaña La Chiruca en las inmediaciones de San Miguel, entre los concejos de Grado y Yernes y Tameza, el pasado mes de abril, continúa recuperándose satisfactoriamente. Aunque mostraba un buen estado de salud, la cría de oso se hallaba aislada de su grupo familiar. Tras intentar infructuosamente devolverla al núcleo familiar se desencadenó el protocolo de recuperación y asistencia veterinaria.
Ahora, tras haber doblado su peso en un mes, alcanzando ya los 7 kilos, el osezno se encuentra en un cercado habilitado por el Principado en el concejo de Proaza que cuenta con sistemas de videovigilancia. Allí permanecerá bajo el cuidado de la Fundación Oso de Asturias (FOA) hasta ser reintroducido en el medio natural en las mejores condiciones.
El vídeo facilitado recientemente por el Gobierno del Principado muestran cómo el esbardo goza de buena salud con una clara disposición al juego y al descubrimiento del entorno natural en el que se encuentra.