Aprovechando su experiencia como profesora de protocolo, Patricia Fuente ha publicado ‘Abuelo, mándame un e-m@il’ (Ed. Paraninfo), donde aplica sus conocimientos para animar a los inexpertos a aproximarse a la informática de forma amena y práctica. ¿Lo principal? Perder el miedo al ordenador.
-Me coincidió dar alguna clase particular a personas mayores, de sesenta y setenta años, y vi que tenían problemas con determinadas tecnologías, sobre todo con la informática. Aunque luego empecé a ver que personas más jóvenes tenían los mismos problemas. Quizá los de veinte o treinta los resolvemos de forma más fácil, porque hemos nacido entre tecnologías.
-La informática no es cuestión de edades.
-No, el «abuelo» del título es más bien una palabra cariñosa que yo uso para alguien que no sabe sobre estos temas. Yo sentí cariño al enseñar, y quería que el título lo reflejase.
-¿Cuáles son los problemas más comunes a la hora de enfrentarse a un ordenador?
-El miedo fundamental es el miedo a estropear algo. Lo ideal sería que el «abuelo» tuviese su propio ordenador, pero si no es posible, hay que dejarles hacer. Hay que empezar por el principio: encender el ordenador, saber que el ratón no es un animal, quitarles los tecnicismos… Yo tengo una anécdota de una alumna a la que en la primera clase le dije «cierra la ventana» en el ordenador, y ella se levantó a cerrar la ventana de la oficina. En ese momento no te puedes reír, porque están descubriendo esta tecnología que para nosotros es básica, pero para ellos es un mundo nuevo.
-¿El libro está planteado de forma didáctica?
-Sí, y es muy práctico, está todo lleno de ejercicios. Si te pierdes, que no tiene por qué pasar, es muy sencillo volver al paso anterior. Todo está lleno de «recuerdas», de llamadas de atención, con letras grandes y colores… Y también con imágenes, fotos y capturas de pantalla de lo que se van a ir encontrando.
-En el índice está familiarizarse con el ordenador, escribir un texto, imprimirlo, buscar información en internet… y un capítulo dedicado a la calculadora. ¿Por qué te pareció importante?
-Porque muchas veces la gente mayor tiene problemas con los números, y de este modo ven que el ordenador también sirve para sumar y restar, que hay un programa donde pones gastos e ingresos y dándole a una tecla se suma todo… Sobre todo que vean que no todo es escribir o navegar por internet, que hay muchas más posibilidades, como también hay un capítulo dedicado al solitario, que es algo muy fácil, engancha mucho y está en todos los ordenadores.
-¿Habrá un segundo libro en esta línea?
-Me han sugerido que haga un diccionario con términos como tweet, chat, arroba… palabras que la gente mayor no conoce. Pero de momento me voy a centrar más en las redes sociales, algo así como protocolo en la red. Es curioso, porque yo no tengo Facebook; lo he reservado para cuando escriba el libro, para ir contando los problemas y los descubrimientos a medida que me los vaya encontrando.