Javier Fernández-Catuxo García. Fundación Municipal de Cultura, Educación y Universidad Popular del Ayto. de Gijón.
Si hay una construcción en Asturias que ha llamado la atención a los viajeros, forasteros, curiosos, ilustrados, turistas e, incluso, naturales del país, esa es el hórreo. Como no podía ser de otra manera, fue también en esto Jovellanos el primero que describió y reflexionó sobre el hórreo asturiano. […] «Dígame usted ahora si conoce sobre la tierra un edificio tan sencillo, tan barato y tan bien ideado; un edificio que sirva a un mismo tiempo de granero, despensa, dormitorio, colmenar y palomar; sin embargo de ser tan pequeño; un edificio que reúne las mejores cualidades que pueden apetecerse para cada uno de estos usos y, en fin, un edificio en que la forma, la materia, la composición y descomposición, la firmeza, la movilidad sean tan admirables como sus usos, y entonces me disculpará de que haya empleado un objeto tan sencillo tantas reflexiones».