A modo de cooperativa artística nace este musical creado íntegramente en Asturias, que sigue la estela de las grandes producciones de Broadway y comienza ahora su andadura por los escenarios españoles.
Sobre el escenario se presenta una historia de aventuras, de enfrentamiento entre buenos y malos, de solidaridad y, sobre todo, de música: el alma de la melodía ha sido robada, y un héroe llamado Ritmo será el encargado de recuperarla, con la ayuda de varios compañeros. Por el camino ofrecerán al público una selección de temas clásicos de Chicago, Los Miserables, West Side Story, Cabaret, Hair… Un gran esfuerzo de producción que va más allá de una simple enumeración de canciones, según explica el productor Nacho Fernández: «Alguien podría pensar que esto es una antología, pero no: es una exaltación de la música. En el recorrido hemos ido situando grandes clásicos del musical, pero no al azar, sino porque tienen que ver con la historia».
Para poner en marcha esta ambiciosa iniciativa, de financiación totalmente privada, se han unido muchos nombres conocidos de la creación teatral del Principado: «Etelvino Vázquez, David Serna, Estrella García, Luis Antonio Suárez, Rafa Mojas… son de lo mejor que tenemos- valora Fernández- Y fruto de esa unión estamos convencidos de que estamos ante la producción de un musical nacional de primer nivel: la obra y el guión son originales, también la escenografía y el escenario, y la forma de acercarse a los grandes clásicos del género. Y desde luego es una forma original de abordar un proyecto, no creo que en España haya habido un proyecto similar de unión y cooperativa artística».
Esta experiencia es también una forma de generar empleo, en total 42 puestos de trabajo, que incluyen la parte más visible y espectacular: 21 personas en escena, con nueve músicos que interpretan los temas en directo.
Una vez hecho el primer contacto con los escenarios asturianos (en septiembre aún es posible ver El Alma de la Melodía en Oviedo), se dará el salto al resto del país: Logroño, Bilbao o Valladolid son, previsiblemente, las primeras paradas de una gira que se presenta especialmente intensa en 2013. Allí el público tendrá ocasión de sorprenderse con este montaje atípico: «Yo creo que el público se va a preguntar cómo es posible que se haya producido este musical en Asturias -opina el productor- pero es que no hace falta estar en Madrid o Barcelona para producir un gran musical. Hay que explicar que el único secreto es mucho esfuerzo, mucha involucración y mucho talento de las personas implicadas en este proyecto».
Esta experiencia es también una forma de generar empleo, en un momento especialmente complicado. En total cuarenta y dos puestos de trabajo, que incluyen la parte más visible y espectacular: veintiuna personas en escena, incluyendo nueve músicos que interpretan los temas en directo. Al estreno, el pasado 17 de agosto, se llegó tras seis años de intenso trabajo y preproducción. «Aquí se ha demostrado que la unión hace la fuerza. Es cierto que para la iniciativa privada son prácticamente son todo dificultades, pero el mundo es para los que lo intentan».