Namiko: (nombre de origen japonés), hija de la ola, la que camina sobre la ola.
“Namiko me pareció un nombre perfecto para mi taller de lana fieltrada con aguja por varios motivos, primero, porque la cultura japonesa siempre me ha parecido muy interesante, además en Japón hay verdaderos genios en la técnica del fieltrado con aguja, y, por último, como playa que soy, siempre he estado unida al mar.
Empecé a fieltrar lana por casualidad y descubrí una habilidad oculta que me llena, me sirve de terapia y he podido convertir en un oficio, ¿se puede pedir más?
Uso lana cardada y/o peinada de merino principalmente, aunque para algunas piezas también trabajo la lana de alpaca y mohair. La técnica, poco usual en España, consiste en pinchar el vellón de lana con unas agujas especiales, de esta forma se van mezclando los colores y dando la forma deseada. Dadas las posibilidades que ofrece esta técnica intento explorar todo lo que se me pasa por la imaginación, esculturas, cuadros, bisutería y complementos, peluches…
Ahora mismo soy socia del Mercado Artesano y Ecológico de Gijón donde me podréis encontrar cada mes y hago ferias de Navidad y verano”.