Situado en la frontera entre Asturias y Galicia, el Polígono de Barres fue el primero en entrar en servicio en esta zona hace más de 20 años. Esto ha supuesto una gran ventaja para Castropol que vio cómo gracias a la creación de esta área podía dar respuesta a la solicitud de suelo industrial por parte de empresarios de las dos regiones.
Junto con el área de Río Pinto en Coaña, la zona industrial de Barres es una de las más importantes del occidente asturiano. Su desarrollo muestra cómo el área ha ido completando fases e incrementando su atractivo empresarial, incluso fuera de las fronteras asturianas. La primera fase de este polígono ocupó una superficie de 32.726 m2 netos de suelo urbanizado que se agotó en menos de un año; la segunda fase también se vendió en su totalidad mientras que la tercera, que ocupa unos cien mil metros cuadrados, apenas ha recibido demanda. Ante esta realidad, Sogepsa (empresa promotora) ha lanzado varias ofertas con importantes descuentos en el precio del suelo con el objetivo de captar la atención de empresarios indecisos. En esta tercera fase el precio de partida fue de 85€/m2 y se llegó a rebajar hasta 45€/m2.
Actualmente el precio se mantiene en 65€/m2. Ante la dificultad de encontrar inversores que pongan en marcha nuevos proyectos en el área industrial, Francisco José García, presidente de la Asociación de Empresarios del Polígono de Barres (ASPOBA), asegura que hay que cambiar la estrategia por parte de la Administración. «Si a un pequeño empresario o a alguien que quiera empezar su proyecto lo ahogan con la compra del terreno, mal empieza -asegura Francisco-.
Hay personas que compran una finca, se gastan un montón de dinero y ya quedan sin fondos, lo cual implica que no pueden seguir adelante con su proyecto. Quien empieza debería tener ayudas, que el suelo estuviese mucho más subvencionado para poder hacer frente a la puesta en marcha de la empresa. Muchas veces la Administración es como un pez que tiene más boca que cuerpo y si te exprimen a impuestos te acaban ahogando. Además, que vengan empresas y se instalen aquí es una forma de fijar población y esto para sitios como Barres es algo fundamental».
Desde su puesta en marcha el polígono ha ido dando pasos vitales que han ayudado a su consolidación y crecimiento. En el año 2016 se inauguró el ramal que comunica el área con la Autovía del Cantábrico, principal eje de comunicación del noroeste peninsular.
La instalación de una red de cámaras de videovigilancia custodiada por la Policía Local supuso también un gran avance en lo tocante a seguridad y tranquilidad por parte de algunos empresarios que sufrieron diversos robos en sus naves. Actualmente la Asociación de Empresarios está estudiando la mejora de esta red para ofrecer un servicio mucho más completo y sobre todo más seguro.
Pero si hay algo de lo que el polígono está especialmente orgulloso es del proyecto de creación de la Entidad de Conservación que está próximo a ver la luz. Tras vencer la mayor dificultad que fue entenderse con el Ayuntamiento, la Asociación de Empresarios valora muy positivamente la creación de este ente que supondrá una mejora en ámbitos tan vitales como la limpieza, la iluminación o el mantenimiento. «Esta es la única forma de mantener toda la infraestructura al día -añade el empresario-. Estábamos muy mermados a nivel económico sobre todo para afrontar inversiones de primera necesidad, y el alcalde y el concejal de obras, ayudaron mucho en la gestión porque entendieron que la única solución para poder mantener el polígono era entre todos».
A pesar de las mejoras que ha experimentado el área todavía hay temas pendientes que preocupan a los empresarios afincados en la misma y que están pendientes de solución, como por ejemplo el mantenimiento de la rotonda de entrada. La demanda es sencilla pero el Principado no se hace eco de las quejas que le han hecho llegar desde ASPOBA. El presidente de este colectivo explica que «no es normal que en la entrada a un polígono, en una carretera cuyo mantenimiento lescorresponde al Principado, haya una rotonda que tenga maleza con más de dos metros de altura. Aquí hay más de treinta empresas con aproximadamente 200 personas trabajando y no es lógico que la primera imagen que demos sea esa. Lo peor de esto es que no es algo puntual, en anteriores ocasiones hemos llegado a este punto y tienen que darnos una solución definitiva».
La rotonda de acceso al polígono cuyo mantenimiento corresponde al Principado se encuentra llena de maleza. Los empresarios reclaman a la Administración que dé una pronta solución al problema y acabe con la mala imagen que esta situción ofrece.