Es uno de los concejos de más encanto del oriente asturiano, que permite conocer la naturaleza de una forma diferente. Recientemente ha sido habilitada una ruta por el Bosque Beyu Pen, que muestra a los personajes mitológicos de la cultura asturiana en su estado natural, integrados en el paisaje de forma que su descubrimiento es un reto para la imaginación.
Amieva se promociona como lo más natural de los Picos de Europa, y no le falta razón. Buena parte del concejo forma parte del Parque Nacional, y por todo su territorio montañas, valles y ríos conforman un paisaje exhuberante que, sin grandes aglomeraciones turísticas, permiten disfrutar de la naturaleza en estado puro. Monumentos naturales como la Red de Toneyu (un sistema kárstico de más de 16 km. subterráneos) o rutas como la Senda del Arcediano, un desfiladero en el Sella que une Amieva con Sajambre, en León, son algunas de las muchas opciones que presenta el concejo.
La ganadería y la agricultura han influido en el paisaje durante años, que conserva un ambiente rural que poco a poco se va abriendo a iniciativas turísticas. La caza y la pesca, así como el turismo activo (escalada, montañismo) han abierto las fronteras de una zona tradicionalmente aislada, gracias a su particular orografía. También la gastronomía ha puesto a Amieva en el mapa, gracias sobre todo a la calidad de sus carnes (las Jornadas de la Matanza, que se celebran este mes de febrero, son multitudinarias) y al queso de Los Beyos, que se ha hecho con un nombre propio en el amplísimo panorama quesero asturiano.
Mitología viva
Ruta del Chorcu
El chorcu, una trampa para cazar lobos utilizada tradicionalmente por los habitantes de la zona, supone un patrimonio histórico y etnográfico que había que recuperar. Por eso, y en colaboración con Parques Nacionales, se ha creado la Ruta del Chorcu, que nace en el Mirador de la Collada y permite, además de admirar los espectaculares paisajes de la Sierra de Amieva, visitar una de estas trampas. Dado el difícil acceso al chorcu original, se ha habilitado una pequeña senda que facilita la aproximación y la comprensión del funcionamiento de este ingenio, que ayudaba a los pastores a defender su ganado de los ataques del lobo. Hoy en día el chorcu está en desuso, pero su recuperación lo ha convertido en un recurso turístico más, que viene a sumarse a los muchos del concejo.Pinche aquí para ver más reportajes de este concejo