Son muchas las opciones para pasar un día inolvidable y abrir el apetito, disfrutando aún más de los imponentes platos de la gastronomía local.
Para abrir boca
Gran parte del concejo pertenece al Parque Nacional de los Picos de Europa, así que no es necesario hacer notar los múltiples encantos naturales del lugar, y las posibilidades que ofrece para el senderismo, la escalada y el deporte de aventura en general. Rutas como la del bosque Beyu Pen, donde se integran personajes mitológicos, la Senda del Arcediano, que comunica con la provincia de León, o la Senda de la Jocina, son algunas de las opciones de diferente dificultad que se proponen desde Amieva. Los amantes de la espeleología conocen bien la Red de Toneyu, más de 16 kilómetros subterráneos declarados Monumento Natural; los que disfrutan con la etnografía, en cambio, no pueden perderse la Ruta del Chorcu, antiguas trampas para cazar lobos.
La exhuberancia y riqueza natural del concejo de Amieva hacen que, para ser completa, la visita gastronómica deba completarse con la turística.
Queso de Los Beyos. Tesoro natural
En Amieva y Alto Sella encontramos una de las tradiciones lácteas de Asturias: el queso de Los Beyos. Un producto con marca de calidad diferenciada, que es considerado un auténtico tesoro gastronómico, cada vez más reconocido y valorado dentro y fuera de nuestras fronteras.
El queso de los Beyos habla. Habla de la tierra, ya que toma el nombre de un famoso desfiladero de la zona, un lugar donde los pastores elaboraban este manjar con la leche de sus rebaños, en las majadas de estas montañas. Hoy este proceso se realiza en queserías del concejo, guardando la tradición artesanal transmitida de generación en generación. Se produce en los concejos de Amieva y Ponga (Asturias) y Oseja de Sajambre (León) y está amparado por la Indicación Geográfica Protegida IGP “Queso Los Beyos”. Se presenta envasado al vacío en piezas de aproximadamente 450 grs.
El queso de los Beyos también habla al paladar ya que posee buen recuerdo después de haberlo consumido, con una pasta firme, compacta, sin ojos y con sabor suave y algo ácido. Su textura harinosa le permite participar en forma de aperitivo, en ensaladas, salsas, souflés o postres. Si se toma solo, los expertos recomiendan acompañarlo con un buen pan de hogaza y sidra o vino.
Para su elaboración se emplea leche ordeñada por la mañana -de vaca u oveja- mezclada con la ordeñada por la tarde, y se deja que ambas se coagulen durante la noche, lentamente al calor del fuego. El proceso le otorga ese toque amargo que se adivina sólo con olerlo. Posteriormente se trasladan los quesos a un lugar seco y ventilado donde permanecen de tres semanas a tres meses, según grado de curación.
Es tradicional que el primer sábado de junio se celebre en Amieva el Certamen del Queso de Los Beyos, que cada año congrega a cientos de visitantes dispuestos a disfrutar de este placer gastronómico, ya sea crudo o utilizado en diferentes platos, gracias a los menús que ofrecen para la ocasión los restaurantes de la zona. El Certamen cuenta también con señas de identidad autóctonas encarnadas en forma de música tradicional y una muestra activa de artesanía.Pinche aquí para ver más reportajes de este concejo