Septiembre es un buen mes para disfrutar en El Franco. En esta época del año, de mareas vivas y atardeceres rojizos, el concejo ofrece nuevas estampas al visitante. Además de sus atractivos naturales, la villa cuenta con un intenso y variado calendario que no deja lugar al aburrimiento.
El concejo cuenta con recursos de mar e interior. Su ubicación en el litoral del occidente asturiano le proporciona parajes de lo más variado, arenales donde disfrutar de los últimos baños del verano, como Porcía, Pormenande y otras más salvajes -de cantos rodados- pero con una gran belleza natural. Fisonomías acantiladas que se pueden recorrer a pie a través de la Senda Costera, ruta que permite fotografiar enclaves como Cabo Blanco o disfrutar del paisaje desde diferentes miradores -Atalaya o Viavélez-. Exuberantes y verdes prados, bosques y un abundante patrimonio natural y etnográfico que incluye cascadas con impresionantes saltos de agua -Penadecabras-, un puerto marinero, un Monumento Natural de roca caliza como el que ofrecen As Covas da Andía, antiguas herrerías -Boimouro-, y molinos. Todo en El Franco es un reclamo turístico pero en septiembre, además, se añade la existencia de una completa agenda cultural y festiva, cuyos mayores protagonistas son la Jira de Porcía, la Quincena Cultural y las Fiestas de San Miguel.
Playas
En el litoral franquino se pueden encontrar seis playas, de las cuales Porcía, limite con el concejo de Tapia, y Pormenande son las que cuentan con mejores condiciones para el baño. Completan la línea de costa la cala de Torbas y las playas de Monellos, Riboira, Cambaredo y Castello, de cantos rodados. La mejor forma de conocerlas es recorrer el tramo Castello-Porcía de la senda cicloturista y peatonal E-9 que transita por el litoral asturiano y que puede realizarse en aproximadamente tres horas a pie. Durante el recorrido el visitante encontrará miradores y áreas recreativas que le permitirán disfrutar del paisaje.
Territorio
Siete parroquias conforman el municipio de El Franco: Arancedo, A Braña, A Caridá, Miudes, San Xuán de Prendonés, Valdepares y Villalmarzo. Un territorio de 78 kilómetros cuadrados que, aunque goza de unas excelentes comunicaciones a través de la Autovía del Cantábrico, sigue manteniendo su identidad rural. Una de las estampas más características del occidente asturiano la representan los cultivos de maíz forrajero, con el que se alimenta la cabaña ganadera.
Iglesias y palacios
El concejo de El Franco cuenta con varios palacios y abundante arquitectura religiosa que merece la pena visitar. Entre los más destacados se encuentra el Palacio de Fonfría, la ermita de los Remedios, el Santuario de La Braña y la capilla del Palacio de Miudes, también conocido como el Palacio de los Castropol. Esta edificación, del siglo XVI, presenta unos característicos muros almenados y una torre. En la capilla adosada al palacio es posible contemplar el escudo de los Villamil y Acebedo.