Es la mayor área industrial de Asturias: los diez polígonos que forman el área industrial de Roces y Porceyo son, por tamaño y actividad, la referencia dentro del tejido empresarial local y regional. Más de un millón de metros cuadrados en los que se desarrollan actividades industriales y de servicios, que marcan la diferencia en un contexto económico que lucha por recuperarse.
La mayoría de las empresas de Roces y Porceyo son Pymes dedicadas a diversas actividades empresariales e industriales. Todos los servicios en un área industrial que casi es autosuficiente, e incluso se beneficia de la cercanía de las grandes superficies comerciales -hipermercado, tienda de deportes, bricolaje…- lo que aumenta el movimiento de clientes y proveedores.
Por eso el tráfico, que en cualquier polígono es una preocupación de primera línea, aquí se controla especialmente, buscando siempre que sea lo más fluido posible. Las buenas comunicaciones ayudan, así como la señalización, que permite acceder fácilmente tanto desde la Autovía del Cantábrico como desde la AS-II. También es importante el transporte público, que llega hasta aquí en autobús desde la ciudad de Gijón. Como bien saben los usuarios, las líneas habituales que recorrían el polígono (quince y veintidós) se han fusionado en una (línea seis), que tiene un trazado más reducido, pero a cambio asegura la recogida de pasajeros en todas las paradas establecidas.
Una vez dentro del área empresarial, la señalización de las calles es fundamental para no perderse, y por eso se ha cuidado especialmente la nomenclatura, bien visible en las esquinas, casi toda haciendo alusión a nombres de científicos e investigadores. Periódicamente se edita un plano con las parcelas y las empresas situadas en ellas; en ese sentido, por iniciativa de Gespor (Asociación para la Gestión de Infraestructuras y Servicios de los Polígonos de Roces y Porceyo) acaba de publicarse una nueva edición que refleja puntualmente los cambios experimentados en la zona.
Las líneas de bus que recorrían el polígono (quince y veintidós) se han fusionado en una (línea seis), que tiene un trazado más reducido, pero a cambio asegura la recogida de pasajeros en todas las paradas establecidas.
Como en todo la crisis se ha notado, y muchas empresas han sufrido ajustes de plantilla; pero lo cierto es que la actividad empresarial aguanta de forma considerablemente superior a otras zonas similares. Un posible motivo es que mucha de esa actividad responde a microempresas, negocios dedicados a ofertar servicios especializados, que tienen flexibilidad y capacidad para ajustarse a las necesidades del mercado.
Una gestión propia
Otro de los posibles motivos para esta capacidad de resistencia es el modelo de gestión escogido. En Roces y Porceyo existe una Entidad Voluntaria de Gestión, organizada en una comisión integrada por representantes de la Asociación de Empresarios de la zona (Gespor) y del Ayuntamiento de Gijón. Gracias a determinados acuerdos, que se renuevan periódicamente, se han ido estructurando una serie de servicios: limpieza de calles y viales, mantenimiento de zonas verdes e infraestructuras, señalización y urbanización de calles, gestión de residuos (en el polígono además hay un punto limpio). También se cuenta con vigilancia presencial, que es lógicamente uno de los servicios más valorado por los empresarios.
Mucha de la actividad del polígono se debe a microempresas, negocios dedicados a ofertar servicios especializados, que tienen flexibilidad y capacidad para ajustarse a las necesidades del mercado.
Gespor está integrado por casi doscientas empresas; al ser de participación voluntaria, desde la Asociación buscan siempre ofrecer servicios y ventajas añadidas para aumentar el número de socios. Recientemente ha renovado su junta directiva, lo que ha dado también un impulso extra a nuevos proyectos, como la creación de promociones y ofertas exclusivas para los asociados.
Otra de las novedades es la inauguración de un nuevo Centro de Servicios, el pasado año. Aquí hay siete locales comerciales y cuatro oficinas en régimen de alquiler. Esta nueva residencia está gestionada por el Centro Municipal de Empresas de Gijón, y ha supuesto un impulso para los emprendedores de la zona, que de este modo encuentran facilidades para poner en marcha su idea de negocio, estableciéndose en una zona empresarial ya consolidada.