Los años noventa del pasado siglo vieron el nacimiento de una asociación que hoy, casi tres décadas después, es una referencia en la vida cultural del concejo.
Su presidente, Justo «Titu» Manzano, explica cómo hace veintisiete se gestó la creación de la Asociación Cultural a raíz de la desaparición de otra agrupación local, formada por comerciantes y hosteleros. Dando continuidad al trabajo hecho, se concibe la creación de una entidad de tipo cultural, enfocada hacia la promoción turística del concejo. Inmediatamente, aquel grupo que entonces era de trece personas comenzó a organizar actividades.
El estreno como asociación ya logró una importante repercusión local. Se trata del famoso Festival de la Castaña, que tan buena aceptación tuvo en su día, pronto superó los recursos de la asociación y pasó a ser gestionado por el ayuntamiento, con la colaboración de los Amigos de Parres.
También en 1990 se creó el Premio Fayuela, con la intención de ser un reconocimiento para aquellas personas o entidades que hayan desarrollado alguna labor de importancia para el concejo, en distintos campos.
El primer premio concedido se recuerda con especial cariño. Fue para Ramón Llamedo, un personaje bien conocido en Arriondas, hermano de otros Llamedo igualmente notables. «Ramón, que ya era entonces un señor mayor, se unió a nosotros con mucho entusiasmo -explica Titu Manzano-. Los primeros amaguestus con la castaña los hacía él, era un hombre que a todo lo que hacía le imprimía solera». Hoy, la lista de premiados recoge, si no a todos, a muchos de los que a lo largo de estas casi tres décadas han ayudado a que Parres sea un concejo mejor.
El archivo de fotografías antiguas sirve para documentar el pasado y unir a todos los parragueses en torno a su concejo.
Otra iniciativa de la que se sienten especialmente orgullosos tiene que ver con preservar la memoria del concejo gracias a sus imágenes. La asociación, tras años de trabajo «de hormiga» recopilando y digitalizando imágenes, ha logrado crear un archivo de fotografías antiguas que continúa creciendo y que sirve para documentar el pasado de manera gráfica y unir a todos los parragueses en torno a su concejo.
Además de servir para ilustrar sus propias publicaciones (Arriondas: un pueblo una historia, con trescientas fotos seleccionadas), comparten las imágenes en Facebook, generando una suerte de «identidad común» entre los parragueses.
Son muchas las actividades que han desarrollado a lo largo de todos estos años: concursos, conciertos, conferencias, libros, organización de actividades… Por eso en este momento la asociación ve necesario pasar el testigo a otros. «Vamos siendo todos mayores, así que estamos poco a poco dejándole la organización de actividades a otra asociación, Selleros. Son todos chavales jóvenes y tienen mucha fuerza, ¡la misma que teníamos nosotros hace veinte años! Ellos saben que cuentan con nosotros para todo, y nosotros sabemos que es hora de dejar paso a la juventud», concluye Manzano.