Reunidos en torno a la lectura del manifiesto 25N, vecinas y vecinos de Boal expresaron su repulsa hacia la violencia machista que tantas víctimas se ha cobrado en estos años. El ayuntamiento boalés fue un punto más de luz en una extensa red de concentraciones que alzaba su voz por un mundo igualitario y sin violencia.
La pancarta del 25N jalonando la fachada consistorial ya apuntaba el motivo de la concentración en el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia hacia la Mujer, también la mesa informativa habilitada en la Casa de la Cultura. Razones había más que de sobra para ello. Ya son 42 las mujeres asesinadas en España en 2024 y 1.286 desde 2003, año en el que se empezó a recopilar datos sobre las víctimas de violencia de género. La celebración de esta fecha tan especial empezó de la peor forma posible tras conocerse dos casos de víctimas de la violencia machista, una de ellas una joven de tan solo 15 años.
El ayuntamiento boalés fue un punto más de luz en una extensa red de concentraciones que alzaba su voz por un mundo igualitario y sin violencia.
De ahí que en rincones como Boal, un concejo del Valle del Navia, saben que educar en igualdad y contra la violencia, sensibilizar al alumnado y proporcionarles herramientas para identificar y rechazar la violencia de género es una buena forma de combatirla y prevenir las desigualdades. Por eso, el mural “Boal por los buenos tratos” que preside el edificio del instituto, más que una bonita y colorida imagen, es en realidad toda una declaración de intenciones. Diseñado por María Torres, de Verdenaz, quien también capitaneó su realización en 2019 guiando al alumnado del colegio Carlos Bousoño, el mural se ha convertido en un símbolo para el municipio. Y por tal motivo, y como ocurrió en marzo de 2023, alumnos y alumnas de Secundaria y Bachillerato fueron quienes llevaron a cabo labores de restauración para subsanar las deficiencias causadas por la intemperie o bien por actos vandálicos.
“En el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia hacia la Mujer, este año también entregamos una pulsera con el eslogan de “Boal por los buenos tratos””, explica Olga, educadora social del Alto Navia y persona responsable de desarrollar las actividades del programa del Pacto de Estado contra la violencia de género en el Ayuntamiento de Boal. Ella conoce de primera mano el dinamismo de la comunidad educativa en este municipio que, durante varias ediciones, ha protagonizado acciones tan interesantes como las Semanas de la Igualdad en la que niños y jóvenes han podido disfrutar de diferentes actividades: mesas redondas, talleres digitales, concursos fotográficos, talleres de animación a la lectura y un largo etcétera.
En rincones como Boal, un concejo del Valle del Navia, saben que educar en igualdad y proporcionar herramientas al alumnado para identificar y rechazar la violencia de género es una buena forma de combatirla y prevenir las desigualdades.
“En Boal también se celebró el pasado mes de febrero la Semana de la Mujer y la Niña en la Ciencia”, añade la responsable de temas de Igualdad. Con el apoyo del Ayuntamiento y la colaboración de los centros educativos, los menores pudieron disfrutar de un carnaval “con-ciencia”, talleres, charlas, una Feria de la Ciencia y otras actividades, parte de las cuales se llevaban a cabo en diferentes localidades del Principado de Asturias.
Desde el Consistorio también se impulsan acciones dirigidas a concienciar del reparto equilibrado de las tareas domésticas y responsabilidades familiares, como el Taller de Corresponsabilidad Familiar impartido por Branque Asociación Cultural el pasado mes de junio. Y se colabora en eventos como el I Encuentro Mujer Rural, que tuvo lugar en Sampol y que permitió conocer en profundidad la idiosincrasia de las mujeres en el medio rural, su histórica invisibilidad y las amenazas y debilidades a las que tienen que hacer frente en sus quehaceres diarios. También los retos y oportunidades que ofrece el ámbito rural a quienes desean permanecer en concejos como Boal.