Los sectores tradicionales también sacan provecho de las TIC. Las oportunidades comerciales y de negocio se incrementan en la medida en que se manejan nuevas tecnologías y se aplican de forma personalizada a cada negocio.
A finales de 2008 Asturias se convirtió en la primera comunidad en poner en marcha, bajo la coordinación del CTIC, el primer plan nacional de innovación especialmente diseñado para facilitar la incorporación de las Tecnologías de la Información y la Comunicación al sector artesano. Se trataba del proyecto ArteTIC, diseñado con el objetivo de aumentar la visibilidad y participación en Internet del sector artesano. Dos años más tarde, 65 talleres asturianos han recibido asesoramiento tecnológico para mejorar sus negocios y su presencia en el mercado.
La artesana Inés Hurtado fue una de las primeras en apuntarse a este proyecto, desde su taller en Navia. El asesor del CTIC realizó un diagnóstico sobre el estado de las TIC en su empresa y elaboró un informe con las recomendaciones: “Yo ya tenía página web, pero me propusieron mejorarla y además hacer una tienda online en algún portal de artesanía, estar presente como empresa en redes sociales… También me pusieron al día de aspectos técnicos: seguridad, control de software, la Ley Orgánica de Protección de Datos…” Entre las cosas que más le sorprendieron fue descubrir las redes sociales “de las que no tenía ni idea, ni siquiera a nivel personal, así que el planteamiento como empresa me sorprendió aún más”. Gracias a eso, su taller tiene ahora presencia en Facebook. Desde entonces no ha dejado de reciclarse. “Esto es algo que no se acaba nunca. Cuando le coges el truco al blog ya se ha quedado obsoleto, y ahora se lleva Facebook, y luego habrá otra cosa… Hay que estar actualizándose continuamente”. Aprovechando también la cercanía con un Centro SAT, Inés Hurtado sigue en contacto con el técnico que elaboró su informe, y continúa asistiendo a cursos y talleres relacionados con las TIC.
Inés Hurtado se dedica a la bisutería: realiza piezas tejidas con distintos tipos de hilo metálico, mezclando de este modo los materiales propios de joyería con las técnicas del tejido tradicional. Y para su trabajo es básico el acceso a las nuevas tecnologías: “Los materiales que necesito los compro por todo el mundo, así que no podría tener este negocio sin Internet, porque es la vía de relación con todos mis proveedores”.
Inés Hurtado, artesana de la bisutería, fue una de las primeras asturianas en beneficiarse del proyecto ArteTIC. “Hay que estar actualizándose continuamente”.
Dos años después de haber participado en este proyecto, su valoración es muy positiva: “Me ha permitido ganar un poco de independencia. Las nuevas tecnologías son cada vez más necesarias, aunque seamos artesanos y nuestro trabajo sea el de toda la vida. Que luego sirva como promoción, o para obtener un resultado económico, eso ya es otra cosa y cada uno valora hasta dónde quiere llegar, pero lo mínimo es poder manejarse con cierta soltura aunque sólo sea para recibir y ofrecer información”.
Inés Hurtado pertenece al 78% de los talleres asesorados en Asturias que considera que la ayuda recibida les ha resultado sencilla y las soluciones tecnológicas han sido útiles para llevar a cabo los cambios previstos.
Esta iniciativa se enmarca dentro del proyecto nacional ArteTIC, un Plan de Innovación puesto en marcha en 250 pymes y micro empresas de Asturias, Castilla-La Mancha, Extremadura y Murcia. Los asesores de la Fundación trabajaron directamente con los empresarios de talleres artesanos, identificando sus necesidades específicas y ofreciéndoles soluciones individualizadas para cada caso. El resultado ha sido tan positivo que la Fundación Española para la Innovación de la Artesanía, promotora de la iniciativa, ha recibido por este motivo uno de los premios Fundetec.
Gracias a iniciativas como ésta, también los talleres artesanos tienen acceso a las TIC, aumentando su visibilidad y sus posibilidades de negocio.
Como promotora de esta iniciativa, Fundesarte fue ganadora del Premio Fundetec (Fundación para el Desarrollo Infotecnológico de Empresas y Sociedad) en la categoría “Proyecto de entidad no lucrativa destinado a pymes, microempresas y autónomos”.