Ya no es una moda pasajera. El boom de los alimentos ecológicos casa con la sociedad transparente del siglo XXI. Los consumidores, cada vez más responsables, cuidan de su salud, miran más los ingredientes y origen de los productos en el etiquetado y compran alimentos sanos y de calidad. Las cifras demuestran que los asturianos son cada vez más favorables a los alimentos ecológicos.
Antes había que dirigirse a las cooperativas locales, mercadillos o tiendas especializadas para encontrarlos, hoy la mayoría de los establecimientos de alimentación ofrecen productos ecológicos que abarcan frutas, verduras, legumbres, zumos, cereales, productos lácteos, carne, miel y muchos más.
La campaña “Alimentos Ecológicos de Asturias, son lo +” pretende trasladar a la sociedad asturiana la realidad del sector ecológico, promocionar su consumo y familiarizar al ciudadano con el sello de COPAE como única marca de garantía.
El aumento de la demanda ha sido una de las fuerzas impulsoras de la producción ecológica en la región. En 2019, la superficie dedicada a la agricultura creció un 6,3% respecto al año anterior, también aumentó el número de productores en un 6,1%, según datos publicados por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.
También se han inscrito más empresas en el registro del Consejo de la Producción Agraria Ecológica de Asturias (COPAE) porque tener una línea de productos ecológicos es casi una exigencia de las grandes distribuidoras de alimentos. Según datos de este organismo público, contamos con 450 productores certificados en la región, 122 envasadoras, transformadoras o distribuidoras y más de 170 puntos de venta y restaurantes con productos ecológicos.
COPAE es la encargada de controlar y certificar que los alimentos sean elaborados, envasados y comercializados siguiendo la normativa de la agricultura ecológica. Para ello, realizan controles exhaustivos a sus operadores, así como analíticas de los productos para detectar posibles residuos de pesticidas, antibióticos, organismos modificados genéticamente, aditivos u otras sustancias no autorizadas en producción ecológica. Por tanto, es muy importante buscar el sello COPAE a la hora de comprar los alimentos ecológicos asturianos porque siempre será garantía de que se está disfrutando de alimentos sanos, seguros, limpios, justos y… ricos. Sólo los alimentos ecológicos certificados pueden llevar las menciones ecológico, eco, biológico, bio y orgánico.
Para los pequeños productores disponer de esta certificación también les aporta muchas ventajas competitivas y mejoras de rentabilidad que se traducen en un valor añadido y una mejora en la calidad de sus productos.
Apostar por este tipo de producción es además una vía para que la gente vuelva al medio rural y contribuye a frenar su despoblación. La mayoría de las iniciativas de emprendimiento rural que se dan en la actualidad lo hacen bajo nuevos modelos, apuestan por la producción ecológica como una forma de vida que une la sabiduría tradicional con las nuevas tecnologías para mejorar la producción y poder ofrecer los mejores alimentos. Estas nuevas iniciativas se proyectan desde la óptica de sostenibilidad ambiental, económica y social, no solo como salida laboral. A esta actividad emergente se están sumando cada vez más personas, sobre todo jóvenes y mujeres con formación, enfoques diferentes que están dando un aire fresco al sector.
Asturias, además, tiene la suerte de contar con unas condiciones naturales excepcionales para producir alimentos ecológicos. La práctica de la agricultura ecológica es totalmente viable para la producción de frutales, de huerta y otros cultivos gracias a la abundancia de agua y a la riqueza de la materia orgánica del suelo. Los prados y pastizales suponen un potencial para el desarrollo de explotaciones ganaderas ecológicas, dando como resultado productos de gran calidad como carne, miel, huevos o leche. Y los recursos genéticos suman una riqueza de valor incalculable: las razas autóctonas y las variedades locales de cultivos tienen un papel fundamental en el desarrollo de la ganadería y agricultura ecológicas por su adaptación al medio y resistencia a enfermedades.
A esta actividad emergente se están sumando cada vez más personas, sobre todo jóvenes y mujeres con formación, enfoques diferentes que están dando un aire fresco al sector.
Además de contribuir al desarrollo rural, la producción de alimentos ecológicos ayuda a la protección del medio ambiente, en consonancia con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030.
La pandemia ha demostrado que la salud y la alimentación de la población no puede estar en manos de terceros países, que los sectores estratégicos no deben deslocalizarse y que gracias al esfuerzo y tesón de los agricultores y ganaderos las estanterías de los supermercados se han mantenido surtidas. Apostar por la agricultura ecológica es apostar también por nuestro futuro y el de nuestra tierra. Y aquí el papel del consumidor es esencial para poder seguir avanzando.
Lo + de Asturias
COPAE ha puesto en marcha una amplia campaña de comunicación bajo el lema “Alimentos Ecológicos de Asturias, son lo +” (#sonlomas) para dar a conocer sus beneficios y fomentar su consumo con el sello del organismo como aval de garantía. El objetivo final es que estos productos ocupen un papel cada vez más importante en la cesta de la compra de l@s asturian@s porque son más sanos, más limpios, más justos y… más ricos.
La salud se ha convertido en la principal fuerza motriz del consumo del producto ecológicos. En este ámbito, los productos asturianos dan la nota porque con la garantía del COPAE sabemos que los alimentos ecológicos asturianos son más sanos y seguros, libres de plaguicidas de síntesis química; además en su elaboración está restringido el uso de aditivos y no se permiten el empleo de colorantes artificiales. Tampoco de organismos modificados genéticamente, así como el uso preventivo de antibióticos, por lo que los alimentos ecológicos están libres de residuos procedentes de estas sustancias.
Hoy la mayoría de los establecimientos de alimentación ofrecen productos ecológicos que abarcan frutas, verduras, legumbres, zumos, cereales, productos lácteos, carne, miel y muchos más.
Por otro lado, hay que destacar la importancia de la venta directa y los circuitos cortos de comercialización que ofrecen potencialmente la capacidad de tener mayor control sobre los aspectos ambientales, sociales y económicos de la producción y distribución. Los alimentos ecológicos asturianos son más justos porque contribuyen al desarrollo sostenible del medio rural aportando un valor añadido a los alimentos que permite que los pequeños productores mejoren su rentabilidad y mantengan la actividad económica y la cohesión territorial en las zonas rurales.
Rico, rico… los alimentos ecológicos asturianos proceden de un sistema de producción que respeta los ciclos naturales sin utilizar fertilizantes químicos, con suelos fértiles donde se cultivan productos con más sabor y aroma.
La campaña promocional del COPAE pretende trasladar a la sociedad asturiana la realidad del sector ecológico, promocionar su consumo y familiarizar al ciudadano con el sello de COPAE como única marca de garantía.
Consumir alimentos ecológicos es apostar por una manera de vivir más respetuosa con la naturaleza al tiempo que propiciamos un consumo más local, enfocado hacia un modelo agroecológico.
Aquí puedes consultar el directorio de productores y operadores ecológicos asturianos:
www.copaeastur.org
Y conocer la realidad de distintos productores adscritos al COPAE, los valores de sus alimentos, y la responsabilidad que ello conlleva: