La disponibilidad de suelo industrial es una importante fuente de riqueza para el entorno, más en un concejo de la Asturias Central, donde el espacio suele estar muy solicitado. En Morcín han habilitado un parque empresarial modélico, apostando por las pymes que generan empleo en el municipio.
El pueblo de Argame, a escasos kilómetros de Oviedo, tiene un reducido casco histórico que conserva aún el encanto rural y el tipismo asturiano. Empresarialmente cuenta con pequeños negocios que dan servicio a la población y con alguna iniciativa de turismo rural que busca aprovechar los encantos del entorno. Sin embargo, en los últimos años el pueblo ha experimentado una pequeña revolución en forma de parque empresarial, lo que ha cambiado la fisionomía de Argame y ha supuesto un impulso importante para todo el concejo.
Las obras de adecuación comenzaron en 2008, aunque la idea llevaba ya tiempo gestándose: ¿por qué no aprovechar los terrenos baldíos a la ribera del río Caudal para ofrecer un terreno bien situado a nuevas empresas? El terreno, en efecto, está perfectamente ubicado en la N-630, a unos diez kilómetros de Oviedo, con un acceso cercano a la A-66. Además, en las obras realizadas se ha puesto especial cuidado en cuidar el entorno, rodeado de prados verdes, con la vista puesta en las cumbres del Monsacro, que dominan el paisaje, y la cercanísima Sierra del Aramo, Paisaje Protegido.
Para llevar a buen puerto este proyecto fue necesaria la colaboración entre el Ayuntamiento de Morcín y la sociedad estatal Sepes (Entidad Pública Empresarial de Suelo, del Ministerio de Vivienda). Gran parte del presupuesto se financió gracias a los Fondos Mineros, destinados a la reactivación económica de zonas perjudicadas por el cierre de minas.
Vida empresarial
Hoy en día, el Parque Empresarial de Argame está compuesto de trescientos mil metros cuadrados, repartidos en 98 parcelas. Aquí se encuentran empresas del sector alimentario, distribución, constructoras, mudanzas, madera, carpintería de aluminio, imprentas, sector textil, cine y televisión… también hay una gasolinera y negocios de restauración, con lo que los servicios básicos están cubiertos. Además, la cercanía a los núcleos de población donde hay oficina de correos, servicios médicos o sucursales bancarias, facilita aún más el trabajo diario. Se plantea incluso la apertura de una guardería en Santolaya, lo que vendría a dar respuesta a una demanda cada vez más habitual en este tipo de ubicaciones empresariales.
Argame surge como ejemplo de desarrollo en foros especializados, donde se destaca especialmente el planteamiento integral del polígono y la calidad de sus infraestructuras. Se cuenta, entre otros, con servicio de recogida de basuras, suministro de gas y fibra óptica, que está disponible tanto en Argame como en Santolaya. Además, se han respetado y planificado las zonas verdes, espacios de aparcamiento, calles de trazado amplio y naves de diseño cuidado.
El 100% del espacio disponible está adjudicado. El precio, muy asequible, junto a la posibilidad de acceder a ayudas de los Fondos Mineros, ha acelerado el proceso de venta. En muy poco tiempo se han ido construyendo las naves, de modo que el Parque funcionará pronto a pleno rendimiento. Esto se debe en parte a que cada parcela comprada tiene que ser edificada, gracias a un acuerdo que compromete al comprador. La crisis ha afectado al calendario previsto y retrasado alguno de los proyectos, e incluso algunas empresas han renunciado a establecerse aquí; sin embargo, su lugar ha sido rápidamente ocupado ya que son muchas las empresas interesadas en esta ubicación.
Impulso económico
Muchas de las empresas aquí instaladas se han trasladado a Morcín con toda su plantilla, pero otras han ampliado e incluso han surgido algunas nuevas, que han creado ofertas de empleo para la gente de la zona. Precisamente uno de los criterios a la hora de adjudicar las parcelas ha sido la creación de empleo, en especial el femenino. También se valoró que fueran empresas no contaminantes o con arraigo en las cuencas mineras.
Varias de las empresas del Parque están desarrollando proyectos de I+D+i, mientras que otras desarrollan planes de formación, mediante los cursos FORMIC. De este modo se busca fortalecer no sólo el tejido empresarial de la zona sino también la cualificación de sus habitantes, contribuyendo a crear un entramado profesional sólido y de futuro. Muchas de estas empresas, además, están estableciendo acuerdos comerciales y planes de exportación, llegando a mercados emergentes y tan prometedores como el asiático.
A pesar de la complicada situación global, el balance del Parque Empresarial de Argame es más que positivo. En esa línea, se contempla la ampliación de Argame II, en unos terrenos de setenta y ocho mil metros cuadrados situados en la orilla opuesta de la N-630.
La importancia del entorno
Desde el primer momento se ha buscado que el parque esté integrado en el entorno, con espacios reservados para las zonas verdes y arboladas, cuidando la estética tanto en el planeamiento como en el diseño de las naves, para que no desentone con el impresionante paisaje que rodea el Parque. El criterio medioambiental ha sido básico en el planteamiento inicial y lo sigue siendo en las actividades diarias, como la recogida de basuras. Ésta es la diferencia fundamental entre un Parque Empresarial y un Polígono Industrial: que todas las empresas aquí instaladas se dedican a actividades no contaminantes, lo que aporta una mayor calidad de vida y proporciona un ambiente de trabajo óptimo. En Argame, más del 10% de las empresas están relacionadas con el sector agroalimentario, lo que potencia aún más el vínculo con el medio rural. Con sus características propias, Argame aúna las ventajas y comodidades de un entorno urbano e industrial junto a las de un entorno rural con un gran potencial.