A sólo veinte minutos de Oviedo, los amantes de los deportes de invierno tienen en la Sierra del Aramo un escenario perfecto para la práctica de su actividad favorita. Con esquís, raquetas o crampones, los aficionados a la nieve pueden disfrutar en la que se ha llegado a llamar ‘la tercera estación invernal de Asturias’.
El boca a oído es lo que mejor funciona. Cientos de aficionados a la nieve han encontrado en L’Angliru una improvisada estación de esquí que permite matar el gusanillo, sin necesidad de grandes desplazamientos. La calidad y cantidad de nieve que suele acumularse en estas montañas ha hecho que los amantes del deporte blanco acudan los fines de semana a disfrutar de estas cumbres. Era un secreto a voces, pero el año pasado la afluencia de gente se disparó, generando en ocasiones importantes atascos en la carretera, más estrecha de lo habitual por efecto de la nieve. Para evitar situaciones como esas, «el Ayuntamiento va a adquirir una cuchilla quitanieves adaptable a un todoterreno, con la idea de poder mantener limpia la carretera desde La Vega-Riosa a Viapará. Allí se podrán dejar los coches en el aparcamiento público y continuar a pie el ascenso al puerto», comenta la regidora, Ana Díaz.
A partir de ahí sólo queda disfrutar del esquí de travesía, de un itinerario con raquetas, crampones o en trineo, siempre tomando las precauciones adecuadas por el peligro de avalanchas. Lo sabe bien la montañera asturiana Rosa Fernández, una de las deportistas habituales de estas cumbres. «Es uno de mis lugares favoritos para entrenar, en invierno con esquís de travesía y el resto del año con bicicleta. A sólo veinte minutos de Oviedo, puedes disfrutar del esquí, deslizándote por cualquiera de las vertientes de la Sierra, siempre con cuidado. Cuando nieva mucho, hay un punto en la zona de la Cueña en el que siempre se producen avalanchas», advierte. Precisamente esta montañera ha tenido mucho que ver con el boom invernal de L’Angliru: «Muchas de las chicas de nuestro Club Una a Una han esquiado en la Gamonal y han hecho L’Angliru tanto con esquís como con bicicleta de montaña. Todo eso lo divulgamos a través de las redes sociales. Es un lugar que me encanta y quiero que mis amigas/os sepan lo que tenemos al lado de casa». La difusión de esta nueva vertiente deportiva, hasta ahora minoritaria, ha hecho que se contemple la zona con otros ojos, sumando nuevas posibilidades turísticas a la larga lista de este paisaje natural.