¿Cuántas veces necesitamos algo que no sabemos hacer, o no tenemos tiempo para hacerlo? Para poner solución a este problema se han puesto en marcha los bancos de tiempo. Marta Díez es la Coordinadora del Centro de Voluntariado y Participación Social del Área VII que abarca los Ayuntamientos de Mieres, Pola de Lena y Moreda. Allí, como en otros centros de Asturias, gestionan el programa Tiempo x Tiempo.
La idea es muy sencilla, pero puede solucionar muchas situaciones de la vida diaria. Cuando una persona se asoma como voluntario a esta idea debe tener claras dos cosas: qué necesita y qué puede ofrecer a cambio.
-¿En qué consiste esta iniciativa y en qué estado se encuentra?
-Esta iniciativa surge en el 2006 a partir de los Centros de Voluntariado de Participación Social, que son agencias financiadas por la Consejería de Bienestar Social y Vivienda, y gestionados por diferentes entidades. Para promocionar el voluntariado y el asociacionismo de la zona, el Centro de Voluntariado presta labores de información, asesoramiento, apoyo técnico y coordinación de todas las asociaciones que hay en el área. Los Centros de Voluntariado presentaron la idea del banco de tiempo al Concurso Ideas Sociedad de la Información, y ganó. Los dos mil euros del premio se emplearon como una especie de subvención para que empezase a funcionar.
“En la Web existen más ofertas que demandas: cuidado de niños, paseos de perros, prevención de riesgos laborales, clases de fútbol, idiomas, masajes…”
-¿Cuál es la diferencia respecto a otros bancos de tiempo ya existentes?
-Éste es un banco de tiempo como muchos otros que hay en todo el país. La diferencia es que aquí en el intercambio siempre tiene que estar presente una asociación, bien como tal, o bien personas que pertenezcan a alguna. Para empezar a funcionar con el banco de tiempo, la persona tiene que registrarse en la página web www.voluntastur.org, y en ese momento ya recibe cinco créditos o unidades temporales, que son los que te permiten demandar servicios. Una vez agotados esos créditos, tendrías que ofertar tú un servicio, y por cada hora prestada te darían una unidad temporal.
-¿Qué servicios se pueden ofrecer?
-De todo tipo. En la Web existen más ofertas que demandas. Tenemos ofertas de cuidado de niños, paseos de perros, prevención de riesgos laborales, entrenadores de fútbol que se prestan a dar clases, idiomas, masajes… También hay bastantes ofertas de conocimientos informáticos, lo que viene muy bien a muchas asociaciones, que tienen ahí una dificultad. Mucha gente oferta este tipo de conocimientos y servicios, incluso para tramitar subvenciones y facilitar la labor de las asociaciones en temas de contabilidad, administración o marketing.
“La diferencia con otros bancos de tiempo es que aquí en el intercambio siempre tiene que estar presente una asociación, bien como tal, o bien personas que pertenezcan a alguna”
-¿Qué balance hace desde que se puso en marcha este proyecto?
-No muy halagüeño, está costando bastante. Cada vez hay más ofertas, pero curiosamente no se están colgando muchas demandas. No sabemos la razón, y por eso estamos planteándonos centrar la labor de los Centros de Voluntariado en la difusión del programa, necesitamos darlo a conocer. En todo el territorio del país hay un montón de bancos de tiempo que no acaban de despegar. Es más fácil cuando se hace de persona a persona, no hay tantos formalismos, pero consideramos más adecuado que intermedie una asociación, para dar un poco más de legalidad a los servicios, que así van a estar más cuidados.