Lo que hace unos años nació como un proyecto vital para el Polígono de Barres a día de hoy es ya una realidad. Con una inversión autorizada por el Gobierno del Principado de 1,1 millones de euros el pasado mes de septiembre se inauguró el ramal que conecta el área industrial con la Autovía del Cantábrico.
Son 568 metros en línea recta y suponen un gran avance para todos los empresarios del polígono que, hasta ahora, dependían del tráfico de la carretera nacional. Francisco José García, Presidente de la Asociación de Empresarios del Polígono (Aspoba), asegura que esta obra es un beneficio en todos los sentidos. «Es buena para los empresarios que estamos aquí ubicados pero sobre todo para los que tienen que ver con el sector del transporte. También es positiva para Sogepsa a la hora de la venta de las parcelas… La forma de acceder al polígono es completamente distinta y después de la crisis que hemos vivido, esto nos da una dimensión completamente diferente. Con este acceso nos situamos como uno de los polígonos de referencia del occidente de Asturias. Para mí esto cambia el futuro al 100%». Prueba del gran beneficio que supone es que la Sociedad Mixta de Gestión y Promoción del Suelo (Sogepsa) se refiere a esta obra como el complemento perfecto a la tercera fase de ampliación del polígono que quedó concluida en el año 2012.
La creación de una Entidad de Conservación para las dos primeras fases del polígono ya está muy avanzada.
Otro de los proyectos que ha supuesto un gran avance para este polígono, situado tan solo a 4 kilómetros de Castropol y muy cerca de la comunidad gallega, ha sido la oferta que Sogepsa lanzó a mediados de mayo a través de la cual los empresarios que estuviesen interesados podían adquirir parcelas en la tercera fase del polígono con una rebaja del 38%. En esta fase, que cuenta con una superficie total de 101.500 metros cuadrados y está dividida en 104 parcelas, es en la que se van a instalar estas nuevas empresas (cinco hasta la fecha) que han valorado no solo la oferta en cuanto al precio del suelo sino también el tratarse de un polígono industrial consolidado, con un gran volumen de empresas funcionando desde hace años y una asociación de empresarios preocupada por atender y mejorar las condiciones de todos los empresarios. «Pienso que todo lo que sea diversificar está bien –comenta Francisco José García-. Todas las empresas que se instalaron aquí el año pasado están funcionando bien, las ves que crecen y hay algunas que han doblado la plantilla que tenían. Somos una zona rural y, que una empresa contrate a dos o tres personas, se nota porque eso supone un parado menos en una familia y es un sueldo más que entra en una casa. Además está el astillero que está siendo un motor importante para la zona con más de 500 empleados y con bastante carga de trabajo. Se nota que también se está empezando a activar la construcción con alguna obra o reforma. Todo lo que sea movimiento está bien y esto es cuestión de ir como las hormigas: poco a poco». Entre las empresas que se instalarán en esta nueva fase se encuentra un gasocentro que en breve dará servicio a empresas y particulares.
En el desarrollo y mantenimiento del polígono tiene mucho que ver ASPOBA, la Asociación de Empresarios del Polígono de Barres que, desde el año 2003, gestiona los servicios del mismo.
Sobre la mesa de la Asociación de Empresarios se encuentra ahora un proyecto en el que Francisco José García está muy implicado: la creación de una Entidad de Conservación. Ya se ha creado la Junta Rectora y el camino para su consolidación ya ha comenzado a recorrerse. «La Entidad de Conservación se crea con los propietarios y el Ayuntamiento, y gracias a ella podremos acometer proyectos que hasta ahora no nos podíamos plantear. El polígono hay que verlo como un espacio de trabajo que hay que cuidar y tener en buen estado porque es un bien para todo el mundo y una mejora para todos los que somos propietarios», comenta Francisco.
A día de hoy hay dos temas que exigen una solución inmediata y que condicionan el día a día de los empresarios del polígono. El funcionamiento de la fibra óptica no es el adecuado para un área industrial que aspira a seguir creciendo ofreciendo a sus usuarios todas las ventajas posibles. «El otro día lo estuvimos comentando con el Ayuntamiento y es un tema que no se acaba de poner en marcha –afirma el Presidente de la Asociación-. Tal y como se está moviendo ahora todo en base a las nuevas tecnologías, tenerla activa en el polígono vendría muy bien a todas las empresas. Las cámaras de seguridad están conectadas a través de fibra óptica al Ayuntamiento, pero el resto no está activo. El alcalde se comprometió a buscarnos una solución».
El otro problema es la escasa presión de agua que existe en el polígono ya que desde el depósito hay muy poco desnivel. Desde la Asociación instan a Asturagua –empresa que tiene adjudicado el servicio- a que pongan una solución sobre la mesa y den un servicio acorde al precio que los usuarios están pagando en sus facturas.
Quedan otros temas como reforzar el sistema de videovigilancia, señalizar de nuevo la zona de las calles ó habilitar alguna otra zona de aparcamiento. Pero todas estas acciones se podrán afrontar de una manera mucho más efectiva en cuanto la Entidad de Conservación esté en marcha.